El agua de valencia hermana a cualquiera, la verdad. Y más si te la ofrecen un sábado al mediodía en el Passeig de ses Fonts al despuntar el sol tras un par de días de tormenta.
Pero no, ése no era el único atractivo en la degustación de productos que ofreció ayer la Asociación Valenciana de Sant Antoni. Buena fe pueden dar las más de trescientas personas que han superado una cola ordenada entre vallas dispuestas junto a la barra. Como en el aeropuerto en verano. Cada una de ellas con un chupito de agua de valencia y un plato de plástico en mano, con el que recogían embutidos, quesos y elementos más autóctoctonos como llonganisses de pasqua u otros como sobrasada. ¿Sobrasada valenciana? «Sí, hacemos charcutería igual que los sitios que tenemos cerca, como salchichón o chorizo, y sobrasada, pero nuestra sobrasada no es como la de Eivissa, es como la de Mallorca, para untar», explica la presidenta de la asociación, Sandra Borrás.
Mientras Sandra muestra los embutidos y los dulces, como pastelitos de calabaza o «la tarta cristina», destapa una olla gigante: «Aquí hay 80 litros de agua de Valencia». Ella misma los ha preparado para congratular a sus vecinos. «Nos sentimos muy integrados, yo me he criado en Eivissa, pero nos gusta mantener nuestras costumbres», recalca. Y se nota, sobre todo con las personas que portan el barroco traje típico y que centran toda la atención: la fallera mayor, la fallera mayor infantil, el presidente de la falla y otra señora ataviada de igual manera. Quedan dos meses para fallas, pero el cargo se lleva y se luce.
El exacerbado sentimiento fallero es el que expresa Sandra Borrás cuando habla de la asociación: «Somos 70 personas muy activas y hacemos muchas actividades dentro del pueblo». Como ejemplo, relata que la degustación de productos típicos ha empezado con un pasacalles de la Banda Municipal de Música que ha tenido su meta en la carpa del Passeig de ses Fonts, donde se han interpretado tres temas «y ‘Valencia’ en honor a la uno de sus músicos que es de la asociación», resalta. Explica que también forman parte del invite popular a horchata y fartons en Sant Bartomeu, el patrón de verano de Sant Antoni, así como en la despertà con la que por la mañana lanzan petardos por todo el pueblo para anunciar su fiesta de fallas.