@B.R./ El responsable del bar Pereyra, Eric-Jan Harmsen, ha criticado la pasividad del Ayuntamiento de Eivissa ante sus peticiones. Se de la circunstancia de que Harmsen reclamó hace ahora más de dos años (en agosto de 2011) una revisión de oficio del la ampliación del bar concierto del Teatro Pereyra, que formalizó la propiedad sin autorización de Harmsen, así como el expediente de la otorgación de la licencia de obra mayor para poder llevar a cabo la reforma de las instalaciones, consideradas Bien de Interés Cultural (BIC).
A día de hoy, el Ayuntamiento de Eivissa no ha contestado al responsable del bar y según apunta éste y basándose en la normativa legislativa, el Ayuntamiento, conforme dispone el artículo 42.1 de la ley 30/1992 del Régimen Jurídico de Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, “tiene la obligación de resolver la información solicitada que se formuló de oficio, en este caso emitiendo al Consell Consultiu de las Illes Balears la indicada solicitud, de acuerdo a lo establecido en el artículo 102 de la ley”.
Ante estos hechos, y la continuación de los trabajos de cubrir los restos arqueológicos ante un silencio administrativo que no se le presupone, según esta normativa, Harmsen se siente desamparo ante la institución municipal. Desde el Consistorio, por su parte, han emplazado a este medio a la próxima semana para responder a los motivos que han llevado a la institución a no responder las solicitudes de información reclamadas en 2011.
Además, Harmsen critica que el Consistorio permitió a los propietarios del Teatro Pereyra la ampliación de la licencia, cuando esta documentación está a su nombre y es de su posesión hasta 2018, momento en el que se rescindiría el contrato de explotación actual.