Por Rebecca Beltrán:
Más de 75.000 ejemplares vendidos sólo en España avalan el éxito de la escritora romántica Lena Valenti, un fenómeno que ha trascendido los círculos de la literatura de género y está llegando a lectores de otros ámbitos. La ‘Saga Vanir’ (Editorial Vanir) se convirtió en un fenómeno de ventas nada más lanzarse al mercado su primer volumen en 2010. Dos años y seis libros después, la escritora catalana ha conseguido rendir a sus pies al público español, pero también al italiano, alemán, mexicano, argentino y búlgaro. Brasil y Estados Unidos serán sus próximos puertos de desembarco… Y la Fiebre Valenti sólo acaba de comenzar. El próximo 3 de diciembre la Editorial Vanir publicará su nueva saga, ‘Amos y Mazmorras‘, dos novelas llenas de erotismo, intriga y acción, con el toque único de esta escritora que adora Ibiza y no descarta ambientar en la isla alguna de sus historias.
Siempre explica que la idea inicial para la ‘Saga Vanir’ se le apareció en un sueño. ¿Cuál ha sido el origen de la inspiración para ‘Amos y Mazmorras’, su segunda saga?
Lo cierto es que uno de los personajes fuertes de la Saga Vanir es un Amo, y necesitaba documentarme mucho y bien para darle una buena psique. En agosto quise tomarme el mes sabático, pero viendo un anime muy malo y muy tierno me vino la idea de escribir algo sobre dominación hablando de ese mundo a través de un juego de rol, con su baraja y sus cosas… Luego, con esa base, me vino toda la trama. Y al día siguiente empecé a escribir.
El éxito de la trilogía ‘Cincuenta sombras’ de E. L. James ha abierto las puertas a la literatura erótica con toques de BDSM (Bondage, Dominación, Sumisión y Masoquismo). ¿Se hubiera atrevido a publicar ‘Amos y Mazmorras’ sin este precedente?
Sí, por supuesto. Porque libros eróticos de ese tipo ya hay publicados, y muchísimo más fuertes, pero no son tan famosos como ‘Cincuenta sombras’. Y, para ser un pelín sincera, ‘Cincuenta sombras’ no es una trilogía sobre BDSM. Ese fue el gancho en el primer libro: hablar de algo prohibido y pecaminoso a ojos de muchos, y venderlo con un buen marketing. Pero en las dos siguientes novelas ese trasfondo quedó completamente difuminado hasta que se perdió. No obstante, ‘Cincuenta sombras ha abierto el mercado erótico en general, eso no se le puede negar. Y, además, a mí me encantó leerla.
Usted diseña sus propias portadas, participa en el marketing de sus libros… ¿Nos definiría ‘Amos y Mazmorras’ con un eslogan?
Un thriller romántico erótico diferente. Sin sombras. Sin grises. Sin corbatas. Sólo ‘Amos y Mazmorras’.
Seattle, Barcelona, Chicago, Londres… ¿Para cuándo una novela ambientada en Eivissa?
Pues no la descarto para nada. Eivissa tiene una vida nocturna súper especial, idónea para mis vanirios; y después es hermosísima bajo la luz del sol. Es ideal para una de mis novelas románticas, un marco perfecto. Puede que os sorprenda en un futuro no muy lejano.
La ‘Saga Vanir»’se ha publicado en Italia, Alemania, Bulgaria… ¿Qué acogida está teniendo? ¿Tienen planes de llevar a otros países ‘Amos y Mazmorras’?
De momento la acogida es muy buena y positiva. En Italia están montando la página oficial de la Saga Vanir italiana, y este año tienen previsto sacar el segundo volumen. En Alemania y Bulgaria se publican este año próximo y las expectativas son muy buenas. Para mí es ya un éxito que otros países hayan apostado por mis libros. Para ‘Amos y Mazmorras’ hay algo ya pactado, pero no podemos decirlo todavía hasta que esté todo bien atado. Este año 2013 se presenta muy fructífero.
Dos sagas, una con seis novelas publicadas y la otra con dos. ¿Por qué libro debería comenzar alguien que quiera adentrarse en el Universo Lena Valenti?
Depende de lo que quiera el lector. Si busca romántica paranormal, la ‘Saga Vanir’. Si prefiere algo realista además de erótico, ‘Amos y Mazmorras’. Pero si le gustan los dos géneros, creo que tanto unos como otros demuestran que no son libros típicamente románticos. En ambos se ven mi estilo y mis intenciones. Lo típico no me gusta.
A pesar de la gran cantidad de lectores que atesoran, las novelas románticas siguen sufriendo un gran desprecio por parte de los círculos literarios establecidos. ¿A qué cree que se debe? ¿Se le ocurre alguna fórmula para que la literatura romántica llegue a más amantes de la lectura?
A quien no le guste la novela romántica sin haber leído una nunca tiene un problema: prejuicios. Al haber trabajado en una librería, he visto ese tipo de prejuicios incluso entre los mismos libreros (algunos se hacen los interesantes y se creen muy cultos) que tienen que venderlos. Pero he llegado a la conclusión de que ellos se lo pierden. A mí no me van a convencer para que relea Matadero cinco de Kurt Vonnegut o Ponche de ácido lisérgico de Tom Wolfe y vea por fin si son o no son libros de culto u obras maestras mejores que cualquiera de las novelas románticas que he leído. Para gustos, colores. Hay una manera de que el género romántico sea valorado por fin, y en pequeñas estanterías de librerías no podrá serlo. Lo que se me ocurre principalmente es que esas grandes editoriales que han apostado miles de euros por el merchandising de Cincuenta sombras de Grey de E. L. James, o de Crossfire de Sylvia Day, lo hagan también por títulos del género romántico que no tienen las etiquetas de bestsellers que les cuelgan desde Estados Unidos. Que del mismo modo que han promocionado esos títulos hasta en la sopa y han comprado estanterías enteras para hacerles un buen facing en todos los puntos de venta, lo hagan también con todos los demás. Después de esto, si el libro es bueno todo sale a pedir de boca.
Por último, ¿qué libro está leyendo actualmente y cuáles nos recomendaría a los lectores de noudiari.es?
Me estoy leyendo En el país de la nube blanca de Sarah Lark. Un regalo de una gran editora. Si tuviera que recomendaros una lectura, algunos de mis favoritos sin duda son Cordero y Un trabajo muy sucio de Christopher Moore. Y cualquiera de Murakami.