Una instantánea en blanco y negro de una ‘filadora’ vestida de ‘pagesa’ es la imagen ganadora de la tercera edición de la tercera edición del Concurso de Fotografía Fiestas de Santa Eulària, convocado por el departamento de Cultural del Ayuntamiento de Santa Eulària des Riu. Su autor, Giuseppe Concas, se ha alzado con el premio de 300 euros y la imagen, junto con las otras premiadas, se incorporará al fondo cultural del Consistorio.
Ayer se hicieron públicos los ganadores del certamen, centrado en captar la esencia y la belleza del patrimonio ibicenco, sea este cultural, ambiental o inmaterial, durante el acto de inauguración de la exposición con los cerca de 90 trabajos presentados por una treintena de autores. Dicha muestra permanecerá abierta hasta el próximo 4 de marzo en la Sala Sant Jaume 72, ubicada en la planta baja del edificio de Cultura de la Calle Sant Jaume del pueblo de Santa Eulària.
La instantánea ganadora es un retrato de medio cuerpo, en blanco y negro en el que una de las hilanderas que habitualmente hilan lana en celebraciones tradicionales como la Feria Artesanal del Puig de Missa está concentrada en su trabajo. La imagen evoca tanto los valores de la tradición ibicenca como la fuerza y la expresividad de una mujer de cierta edad y experiencia.
Tras la obra de Concas, quedó en segundo lugar –con un premio dotado con 200 euros- una imagen de tipo completamente diferente. En este caso se trata de una instantánea a color, que se centra en un paisaje sin presencia de personas, pero donde la intervención humana es el eje central. Se trata de una vista de un gran campo justo después de haber sido cosechado, con grandes ‘rulos’ de paja distribuidos por todo el encuadre y una línea de bosque y montañas situadas al fondo. La foto es obra de Lidia Guasch Juan.
También centrada en una combinación entre la belleza del entorno natural y la acción humana, la tercera imagen premiada –que se lleva 100 euros de premio-, es una vista aérea mediante dron en que se encuadra una pequeña cala que alberga una decena de casetas varadero. La propuesta de Daniel Iglesias Meyer destaca por el contraste entre el verde del mar y los tonos rojizos de la tierra, además de apoyar la idea de la integración de las construcciones tradicionales en el entorno puesto que los elementos antrópicos cubren una amplia gama de tonos grises y ocres que no desentonan del conjunto.