@Noudiari Cuando peor lo estaba pasando, cuando estaba arrinconado contra las cuerdas y a punto de desfallecer creyendo que solo la campana le podía salvar de caer noqueado, la fortuna ha salido al rescate del Isleño. Una contra en tiempo de descuento bien conducida por Suso por la izquierda en la que se ha apoyado en Tomás para lanzar una pared ha terminado con un centro a la derecha que Pouet ha fusilado a gol. Ha sido el primer, el único, disparo del conjunto de David Torres entre palos. Efectividad absoluta. Alegría total en las filas locales. Incredulidad en las visitantes
A veces el fútbol no responde a lógica alguna. Este partido es una de ellas. El Montuïri ha sido más equipo, de principio a final, y si alguien ha merecido la victoria este ha sido el conjunto mallorquín. Pero este no es un deporte que se resuelva a los puntos sino por los goles y en este apartado ha ganado el Isleño en el último suspiro.
Con la defensa descolocada, los centrales perdidos, los laterales a medio camino de ningún sitio y el Montuïri campando a sus anchas y fallando uno tras otro remates francos, el Isleño caminaba hacia el precipicio desde el minuto 75. Parecía imposible que saliera vivo de esta batalla el cuadro de Vila, cuando se le ha aparecido la Virgen.
Cierra este triunfo la crisis de resultados del conjunto de Can Misses y le hincha de moral de cara al derby de la próxima jornada en el campo del líder, la Peña Deportiva de Santa Eulària. Mucho tendrá que mejorar el juego el once de David Torres, no obstante, si quiere pescar en unas aguas poco propicias para los visitantes y en las que el tiburón de Mario Ormaechea no deja ni las migajas para sus semejantes.
El partido ha sido de los malos de verdad. Sin ritmo, sin precisión en el pase por ninguna de las dos partes y con pocas ocasiones y casi ninguna clamorosa durante 90 minutos de maltrato continuado al balón. El Isleño apenas ha inquietado el marco contrario. No tiene fluidez el equipo en ataque y carece de ideas e imaginación para romper la defensa o darle al menos un susto al rival. La falta de tino y calidad en el medio del campo de los dos equipos ha dado de sí un continuo goteo de pérdidas de balón que ninguno de los dos ha sabido aprovechar para dar un paso adelante y mirar con peligro al marco ajeno. Un desastre.
Al final, la fortuna ha querido que el Isleño obtuviera el premio que no ha merecido por juego y le ha hecho un guiño cuando más asfixiado estaba con un gol que le brinda una semana de tranquilidad y el oxígeno necesario para mirar al futuro con un halo de esperanza.
– Ficha técnica
Isleño: Miguel Torres, Fran, Hurtado, Javi, Pepe Grimaldo, Pierre Contat (Cardona, min. 66), Ramón (Roberto, min 45), Suso, Galera, Toni Ramírez (Tomás, min. 66) y Pouet.
Montuïri: Víctor, Marcos (Matías, min 52), Álvaro, Gurri, Manresa, Villa (Campomar, min. 77), Tomeu, Rafita, Nando, Ivo y Juanan (Manu, min. 72)
Goles: 1-0. Minuto 91. Pouet a pase de Suso tras una jugada de pared de este último con Tomás.
Áribitro: Rosado Rodríguez, asistido en las bandas por Moll y Fernández. Amonestaron a los locales Suso, Pouet y Javi Escandell y a los visitantes Álvaro, y Manu. Expulsó con roja directa a Pepe Grimaldo e Ivo en el minuto 40 del primer tiempo poor agredirse mutuamente de forma leve. Una rotura de fibras en el gemelo impidió al árbitro seguir en la segunda parte y Fernández tomó el mando mando. Todo el segundo tiempo se jugó con un único linier.
Incidencias: Unos 80 espectadores en el municipal de Can Misses.