SD Formenera y CD Ibiza han empatado a uno en un duelo vibrante e igualado disputado esta mañana en el campo municipal de deportes de Sant Francesc Xavier, donde el conjunto deportivista se ha adelantado en el marcador gracias a un gol de Franco en el minuto 43 y que los de casa han logrado empatar por mediación de Julen Ekiza en el 78.
Una victoria le daba al Ibiza el ascenso directo a la Segunda B RFEF, mientras que una del Formentera le acercaba al mismo objetivo. Al final, ni unos ni otros han logrado su meta debido el empate final, aunque el conjunto deportivista todavía puede celebrar el ascenso esta misma tarde. Para ello necesita que el Platges de Calvià no gane al Constància en el partido que ambos diputan a las seis y media de la tarde en Magaluf, de lo contrario deberá que esperar, como mínimo, una jornada más.
El Formentera se hizo desde el principio con el control del esférico y su juego orbitaba mucho más en campo ajeno que propio. Su adversario le esperaba atrás, listo para lanzar una contra que le diera el premio que había ido a buscar a tierras formenterenses. El dominio local, no obstante, no se traducía en ocasiones claras, y, de hecho, las más nítidas llegaron a balón parado, en sendos saques de esquina que rondaron el gol.
El Ibiza dejó muy claro, a las primeras de cambio, cuál era su plan y en una contra vertiginosa Terán embocó el balón en el fondo de las mallas de la meta local antes del minuto 4, pero el colegiado invalidó el tanto por fuera de juego. Eso era lo que el conjunto de Alberto Gallego había venido a buscar al otro lado de es Freus: contención, velocidad y acierto en el contragolpe como salvoconducto para el ascenso.
El Formentera, quitando este susto, no estaba dando facilidades, ya que el cuero era suyo y en la medular era más preciso y hábil para mantener al adversario lejos de su área. Le faltaba, sin embargo, enlazar un último pase que exigiera a la defensa y al portero, relativamente cómodos con el rol que les había tocado interpretar a pesar de que el balón circulaba cerca de su área.
Salvo una falta ejecutada sin tino y el gol bien anulado en los primeros compases del choque, el Ibiza no había parecido con peligro en ataque. Hasta que, en el minuto 43, el encuentro dio un brusco giro de rumbo debido a un rechace que le cayó a Franco dentro del área, quien remató de forma sutil a gol. El cuadro deportivista empezaba a vislumbrar el ascenso directo, el mismo que se le alejaba al conjunto de la pitiusa Sur.
Pero quedaba mucho para el final. Y el Formentera se puso las pilas tras el descanso y además de tener el cuero de forma mayoritaria, como había hecho en el primer acto, empezó a mirar con descaro absoluto hacia el marco contrario. Se resistía el gol para los de casa. Los de Vila se defendían con orden y acierto y resistían el acoso, hasta que una cabalgada de Mena por la derecha dio paso a la acción del gol de la igualada.
El balón, tras un saque de banda en la derecha, acabó en el lado opuesto para que Julen Ekiza, escorado y con poco ángulo, se sacara de la chistera un tremendo fogonazo que cruzó la línea de gol tras tocar el larguero por abajo para acabar alojado en la red. Buscaron los dos protagonistas un tanto que resultara definitivo en las postrimerías del derbi, pero ninguno de los dos obtuvo mayor recompensa y el duelo acabó en tablas, 1-1.