San Rafael: Moro; Yeste, Guti, Rubén Martínez, José Fernández (Fisher, 46′); Iván Morales, Elías; Salinas (Adri, 46′), Ramos, Vicent (José García, 90′); y Carlos Fernández.
At. Isleño: Ángel; César (Iñaki, 37′), Víctor, Winy, Grimaldo; Tomás, Galera; Suso, Juan Martínez (Puet, 80′), Franco (Vega, 61′); y Paolo.
Árbitro: Jaume Bardají asistido en las bandas por Córdoba y Roig.
Tarjetas: Amonestó con tarjeta amarilla a los visitantes Franco, Grimaldo y Ángel.
Goles: 0-1, Paolo (36′). 1-1, Carlos Fernández (73′). 2-1, Ramos, de penalti (86′). 2-2, Winy (92′).
Incidencias: Partido disputado en el municipal de Sant Rafel ante 300 espectadores.
Debe maldecir el San Rafael el tiempo de descuento, puesto que si el pasado domingo perdía en Santa Eulària en la prolongación ha visto como, de nuevo, en el 92 se le escapaba la victoria en otro derbi, éste ante el Isleño (2 a 2). El partido arrancó con polémica, imprescindible en cualquier partido de máxima rivalidad que se precie, ya que el árbitro no consideró como penalti una carga ilegal de Rubén Martínez sobre Paolo en el área del San Rafael cuando corría el minuto nueve. El delantero del Isleño, muy molesto, y con razón, protestó airadamente la acción al línea, el ibicenco Óscar Roig, pero no le hizo cambiar de opinión.
Parecía que el Isleño, invicto a domicilio, era más ambicioso. No llegaba mucho, pero sí más que su rival, que despidió el primer acto sin chut alguno entre palos. En el 38, la mayor insistencia del equipo de Antonio Asensio le dio como recompensa una falta bien botada al corazón del área por Grimaldo que Paolo, líbre de marca, acertó a rematar a gol de tiro raso, 0-1. Poco o nada pudo hacer el meta rafaler Moro.
Mala suerte
Le sonreía el marcador al Isleño, pero no la fortuna. César, con síntomas evidentes de dolor, tuvo que ser sustituido por un problema de rodilla. Se marcharon los visitantes al descanso por delante en el marcador aunque con un jugador importante menos en sus filas.
La reanudación trajo consigo a un San Rafael más ofensivo, con más hambre y ganas de remontar el vuelo. El Isleño se defendía, pero Carlos primero y Ramos después, en el 86, de penalti, dieron la vuelta al marcador dejando a su equipo a las puertas de la victoria.
Cantaba la parroquia local el triunfo cuando, dos minutos por encima del tiempo reglamentario, Winy tuvo la suya y no falló. El gol dejó helado al San Rafael, que veía, incrédulo, como solo cuatro días después se repetía la misma historia que en Santa Eulària.