El problema formenterense es precisamente ese: la disponibilidad, el riesgo intrínseco de cualquier plantel corto. Porque entre lesiones, sanciones, mareos, dolencias, transfers que no llegan y jugadores a los que no se les puede inscribir a tiempo para la primera fecha del campeonato, rara vez Sanjuán ha podido completar una convocatoria de 18 futbolistas.
«El club tiene que moverse e incorporar refuerzos», dice Tito tras la derrota in extremis de los suyos este domingo en la cancha del Deportivo Aragón, «pero no sé si llegarán refuerzos ni el dinero con el que contamos. Con todo el trabajo que tenemos entrenando a la primera plantilla y preparando los partidos, no vamos a ponernos a seguir y contactar futbolistas cuando no sabemos si los podremos firmar».
Son ya varios los mensajes que el entrenador zaragozano le ha lanzado a la directiva presidida por Xicu Ferrer. La junta del Formentera siempre se ha caracterizado por la cautela. El presupuesto para este año ha aumentado de 600.000 a más de un millón de euros y en Sant Francesc no quieren hipotecas. De hecho, gracias al buen papel realizado el curso pasado en la Copa del Rey y a la eliminatoria jugada contra el Sevilla, el Formentera cerró cuentas con números verdes.
Segunda vuelta
Tito, en cambio, insiste en que son necesarios los refuerzos: «Los buenos resultados en Liga y la victoria en San Mamés han maquillado en los últimos tiempos nuestra situación real. Con trece o catorce futbolistas disponibles no se puede trabajar en condiciones y la segunda vuelta se nos puede hacer muy larga. En más partidos nos puede pasar lo de hoy, que no hemos estado bien y encima hemos llegado fundidos al tramo final, cuando nos marca el segundo el Aragón».
El próximo domingo, el Formentera despedirá el año y la primera vuelta en casa contra otro rival directo por la permanencia como el Peralada. Sanjuán, que volverá al banquillo tras su sanción de cuatro partidos, y Ferrer, que se sentará en la grada, volverán a coincidir. Las próximas semanas dirán si los rojinegros se refuerzan con talento sub23 (tienen que ser jugadores de ese grupo edad al no tener el club pitiuso todas las fichas completas) y alegran el panorama de una plantilla que, pese al momento dulce, puede sobrecargarse aún más de minutos.
El inicio de 2018 les deparará al menos cuatro partidos en dos semanas (con viaje a Mendizorroza para la vuelta de los octavos de Copa y derbi contra la Peña al sur de es Freus incluidos) y, después, aún quedará mucho para sellar la permanencia. Eso sí, con las bajas seguras de Fobi y Dailos, las más que posibles de San José y Rosa, y la quinta amarilla que ha visto hoy Kiko, muchos se preguntan qué se inventará el cuerpo técnico para construir una defensa en condiciones el próximo domingo.