@Noudiari / Nadie dice que sea fácil, ni mucho menos. Jaime Caballero, el nadador vasco de larga distancia que este martes por la mañana inició el reto de unir a nado Jávea con Ibiza, tuvo que abandonar a mitad de recorrido debido a las fuentes olas y, sobre todo, por las picaduras de las medusas.
Sobre las 23.30 horas la organización de la travesía, a través de las redes sociales, anunció que el donostiarra se veía obligado a arrojar la toalla y que se dirigían a Ibiza para que recibiera atención médica por las numerosas picaduras que había sufrido.
Se ponía punto y final así a una aventura con carácter benéfico, puesto que todo el dinero recaudado será para la asociación que el propio Caballero preside a favor de las víctimas de esclerosis lateral amiotrófica (ELA).
El deportista inició la travesía este martes a las 09.55 horas de la mañana desde Jávea para recorrer las más de 50 millas de distancia (aproximadamente 90 kilómetros en línea recta) que separan la península de Ibiza. La dificultad del reto era que lo haría sin ninguna ayuda externa como traje de neopreno o similar, por lo que las medusas se presentaban, como así ha sido, como la principal dificultad.
Jaime Caballero es un auténtico especialista en este tipo de retos, como demostró el año pasando cruzando el Canal de la Mancha ida y vuelta, pero en esta ocasión no pudo coronar con éxito un objetivo que únicamente dos nadadores, David Meca en el año 2006 y Juanjo Serra este mismo año, han logrado superar.
En palabras del propio Jaime Caballero, que llegó a puerto con el cuerpo lleno de las «marcas de la batalla», y con el dolor que produce toda picadura, «cuando la naturaleza no acompaña, es mejor dejarlo e intentarlo en otra ocasión».