El Class Bàsquet Sant Antoni logró este sábado la tercera victoria consecutiva del curso. Fue en un igualadísimo partido ante un CB L’Hospitalet que puso las cosas muy difíciles pero que acabó cediendo por 74-64 en el duelo disputado en Sa Pedrera. Los isleños supieron sufrir para acabar imponiéndose y continuar con su escalada. De la Rúa brilla en los ibicencos con 19 puntos anotados.
Los dos primeros cuartos del choque ya dejaron claro que tocaba ponerse el mono de trabajo. El bloque de Portmany no encontró su mejor juego puesto que se topó a un adversario contestón, que llegaba colista pero que se desenvolvió a las mil maravillas en el parqué sanantoniense. Estuvo tan parejo todo que el primer capítulo acabó con empate a 18. Dani de la Rúa, con cinco puntos, fue el mejor de los pitiusos en la parcela ofensiva, en la que estuvo escoltado por Omeragic y Carreño, con cuatro puntos cada uno. En los catalanes destacó Edgar San Epifanio, hijo del mítico Epi. Demostró tener tan buena muñeca, como su padre, y anotó siete puntos. En su camiseta luce el nombre de Epi y el dorsal 15, el mismo que su progenitor.
El mejor Jordi Grimau apareció en el inicio del segundo cuarto para despertar a su equipo. Cuatro puntos seguidos del capitán sirvieron para establecer el 22-18. Un mate de Da Silva tras asistencia de Haro puso el 24-18 y levantó a los aficionados de sus asientos. El ‘gigante’ local anotó luego un libre (25-18) y, posteriormente, una canasta de Haro, tras robo, disparó al Sant Antoni al 27-18. Cortó la racha local Knowles con dos puntos que dieron aire a su escuadra (27-20), pero Haro volvió a anotar para devolver a los de Portmany la renta de nueve (29-20). Parecía que el Sant Antoni podía romper el partido, pero L’Hospitalet siempre se mantuvo a flote y llegó al descanso sólo cuatro puntos abajo. Dos puntos de Epi siguieron manteniendo las cosas muy igualadas.
En el tercer cuarto los ibicencos comenzaron espesos y el rival vio su oportunidad. Tanto que llegó a ponerse por delante en el marcador. Un triple de Epi estableció el 36-35 y otro de Sevillano el 36-38. Carles Flores, técnico de los baleares, pidió tiempo muerto para aclarar las ideas de los suyos. De poco sirvió porque el Sant Antoni siguió siendo un equipo errático y dubitativo, algo que le dio alas a un L’Hospitalet que llegó al último periodo un punto arriba (49-50 para los catalanes).
En el último cuarto Sa Pedrera se volcó con su equipo, sabedores los seguidores que los chicos de Flores necesitaban el último empujón. La afición ayudó, pero también el gran trabajo defensivo de un Sant Antoni que secó a su adversario. Zurbriggen devolvió el mando a los isleños con un triple (52-50). Grimau anotó dos libres y Da Silva resurgió con un mate (56-50). El entrenador visitante paró el partido para aleccionar a los suyos, pero en la reanudación Grimau robó la pelota y encestó a placer el 58-50. Otra canasta de Zurbriggen fijó el 60-50. Los locales enfilaban el camino de la victoria.
Pero L’Hospitalet no iba a vender tan fácil su derrota. Un 0-5 de los catalanes, con triple incluido de Epi, puso el 60-55. Entonces apareció la figura de Da Silva, que con seis puntos consecutivos volvió a poner tranquilidad para los de Portmany (66-55). Aunque todavía hubo algunas dosis de suspense que De la Rúa se encargó de despejar al final (74-64). En los últimos segundos entró a pista el canterano Adrián Rebollo, que se llevó el honor de debutar en la LEB Plata. El Sant Antoni sigue creciendo.
Ficha técnica:
Class Bàsquet Sant Antoni (18/16/15/25): M. Mollgaard, E. Jonats (6), D. De la Rúa (19), A. Omeragic (6) y P. Carreño (8) -equipo inicial- A. Zurbriggen (5), A. Haro (6), J. Medori, V. Da Silva (11), J. Grimau (13) y A. Rebollo.
CB L’Hospitalet (18/12/20/14): D. Knowles (14), A. Tarrida, N. Baques (12), Epi (15) y Sevillano (7) -equipo inicial- M. Rosado, A. Real (8), V. Sabaraiego (2), A. Rodríguez (6) y A. Homs.
Árbitros: Miguel Ángel Soto Medina y Alejandro Climent Rivera. Sin eliminados.
Incidencias: Partido de la quinta jornada de la LEB Plata, en el grupo Este, disputado en el Pabellón de Sa Pedrera, en Sant Antoni. Unas 500 personas en las gradas.