El flamante campeón de invierno, la Peña Deportiva, se desplaza esta jornada al campo del Alcúdia (domingo, 16,30 horas), donde tratará de reafirmar su condición de líder y dar un nuevo paso adelante en el campeonato. Recupera Mario Ormaechea a los tres futbolistas que estaban sancionados la pasada jornada, De Pablos, José Luis y Rubén Martínez, lo que le permite complentar una convocatoria con más opciones y garantías que ante el Santanyí. No obstante, el equipo tienen aún la enfermería llena de futbolistas y arrastra siete bajas importantes que merman su potencial.
Dice Ormaechea que el campo de los mallorquines tiene una superficie «muy dura» y que la clave para sacar algo positivo «pasa por saber adaptarse al bote del balón, que se eleva más de lo normal» tras su contacto con el suelo. Otro de los aspectos en los que está trabajando el entrenador peñista para preparar este choque es más psicológico que futbolístico.
El hecho de ser líder destacado de la Liga con 10 puntos más que sus rivales inmediatos en la clasificación hace perder a veces el contacto con la realidad y Ormaechea quiere que todos sus jugadores toquen con los pies en el suelo. «Estoy frenando la euforia porque algunos futbolistas ya tienen pájaros en la cabeza, tantos que si se la arrancáramos se iría volando por su cuenta. Estoy incidiendo en que tenemos que ser humildes y en que todavía no hemos hecho nada», advirtió.
El entrenador peñista sabe por experiencia que todos los equipos se crecen ante el líder y avisa, por tanto, de que de ahora en adelante «todos los rivales» les «van a tener ganas». «Jugar ante el líder motiva y ahora todos los equipos van a salir con un plus de motivación extra cuando jueguen contra nosotros», y «más aún después de haber logrado» la jornada anterior «el título honorífico de campeón de invierno».