@C. Vidal / La victoria este fin de semana en el II Torneo Feria de Artà, imponiéndose ni más ni menos que al campeón de la Superliga masculina, el Unicaja Almería, ha elevado considerablemente la moral del Ushuaïa Ibiza Voley, aunque el equipo no quiere lanzar las campanas al vuelo. «Es un resultado esperanzador, pero no quiere decir que a partir de ahora seamos la leche», asegura Javier Escandell, presidente del Club Voleibol Eivissa.
«Está claro que ganar al actual campeón de Superliga, y hacerlo por primera vez en nuestra historia, es importante y en el club estamos muy satisfechos de haber ganado el torneo. El Unicaja es un equipo como en fútbol pueden ser el Real Madrid o el Barcelona, que siempre quiere ganarlo todo y que no entiende de partidos amistosos. Sin embargo, no deja de ser un encuentro de preparación y no hay que darle demasiadas vueltas», afirma Escandell. que siguió las evoluciones del torneo desde New York y que acaba de aterrizar en Ibiza.
El conjunto ibicenco se adjudicó el torneo disputado en tierras mallorquinas después de vencer el primer partido por 3-1 (25-18, 21-25, 25-19 y 27-25) y perder el segundo encuentro por 3-2 (25-23, 25-20, 21-25, 23-25 y 15-11), por lo que se llevó el trofeo por la diferencia de sets a su favor. «La lástima ha sido la escasa repercusión que ha tenido este trofeo en la prensa mallorquina. Somos el primer equipo de Balears de voleibol y apenas nos hacen caso», añade el presidente.
Fiesta benéfica y cicloturismo
Por otra parte, Ushuaïa organiza esta tarde (20.30 horas) una fiesta a beneficio del conjunto ibicenco, por lo que todo el dinero recaudado irá a parar a las arcas del club. «Es una sorpresa y no sabemos si acudirá mucha gente o no, pero puede ser una cantidad importante. Ya veremos», declara Escandell.
Por otra parte, la plantilla del equipo que entrena Toni Corona tendrá este sábado un entrenamiento poco habitual. Los jugadores abandonarán por un día el parquet y el gimnasio y se subirán a una bicicleta de montaña para realizar una ruta cicloturista de 30 kilómetros de recorrido en Santa Gertrudis.