El Govern balear y la Federación de Fútbol han formalizado hoy lunes la firma de un protocolo de colaboración para la prevención, detección y actuación precoz ante situaciones de violencia en el ámbito del fútbol base. El acto ha tenido lugar en la sede de la federación y ha contado con la presencia de la consellera Antònia Maria Estarellas y del presidente de la FFIB, Jordi Horrach, así como del director general de Emergencias e Interior, Pablo Gárriz, y del coordinador del Programa de Policía Tutor, Rafel Covas.
El protocolo, impulsado por el Govern a través del Instituto de Seguridad Pública de las Illes Balears, no conlleva ningún coste económico para la administración y tiene como finalidad establecer un marco de actuación conjunto para erradicar comportamientos violentos desde edades tempranas y fomentar un entorno seguro en los campos de fútbol.
En virtud de este acuerdo, el Govern elaborará materiales didácticos para familias, entrenadores y árbitros, diseñará recursos digitales preventivos, llevará a cabo una formación específica para policías tutores y desarrollará un protocolo de actuación ante casos de acoso.
Por su parte, la FFIB tendrá como misión garantizar la participación de los policías tutores en los cursos de formación dirigidos a nuevos entrenadores y coordinadores, así como la organización de sesiones informativas y preventivas, impartidas también por policías tutores, dirigidas tanto al personal técnico en activo como a las familias de los jugadores y jugadoras de fútbol base. Además, se encargará de comunicar al ISPIB los casos más relevantes de violencia detectados con el objetivo de valorar la intervención preventiva por parte del policía tutor o tutora. Asimismo, se compromete a difundir los recursos de prevención del acoso a través de la plataforma EIVO TV, con el fin de sensibilizar y llegar de forma directa a los diferentes actores del entorno deportivo.
El acuerdo prevé una implantación progresiva y en una primera fase se aplicará a los equipos de fútbol base adscritos a la FFIB, alcanzando a unos cien jugadores y jugadoras menores de edad, así como a sus entrenadores y coordinadores. Posteriormente, se extenderá al resto de clubes de las islas.
Tarjeta roja a la violencia
La consellera Antònia Maria Estarellas, quien ha agradecido la predisposición de la FFIB y de su presidente así como el trabajo y la implicación del servicio de Policía Tutor para elaborar este protocolo, ha destacado que “era necesaria una herramienta útil y eficaz para, desde la coordinación, la prevención y la formación, sacar tarjeta roja a la violencia en los campos de fútbol desde las edades más tempranas, así como para reducir los casos de violencia en las gradas que, desgraciadamente, cada año ocupan páginas en los diarios o minutos en las televisiones y radios y que también acaban sufriendo los niños y jóvenes futbolistas de nuestras islas”.
Por su parte, Horrach ha dicho que “hoy es un día muy importante porque desde el primer minuto que empezó esta legislatura (en la FFIB), en septiembre, hemos dado muchos pasos contra la violencia que nos han llevado a bajar sustancialmente el nivel de agresiones“. Así, ha destacado que “hemos sancionado de manera muy dura a todas aquellas personas que han tenido un comportamiento totalmente inadecuado, pero hoy damos el paso que hemos reclamado desde el principio a la Administración: contar con la ayuda de las fuerzas públicas y los policías tutores para reducir la violencia y garantizar entornos seguros y educativos para todos los niños y jóvenes que forman parte de nuestro fútbol base“.
La iniciativa de este convenio surge a raíz de la experiencia del programa de Policía Tutor en los centros educativos en relación a los casos de acoso entre menores. Según ha explicado Rafel Covas, “muchos alumnos manifiestan que el ámbito deportivo, especialmente el fútbol, también es escenario de comportamientos violentos, una realidad que motivó el impulso de un protocolo específico con el fin de actuar con un enfoque preventivo y educativo”.
Desde el Govern se ha insistido en que la lucha contra esta lacra social requiere la implicación de todos los agentes: administraciones, federaciones, clubes, familias y profesionales. Asimismo, la consellera Estarellas ha explicado que este protocolo se suma a otras iniciativas impulsadas durante la presente legislatura en materia de prevención como el programa de fiestas seguras, a través del cual se ofrece formación y orientación en los centros educativos sobre los riesgos asociados al ocio juvenil.