@C. V. / Dicen que cuando una puerta se cierra, otra se abre. Es lo que le ha pasado a Javier Seral Gallego (Palma, 22 de enero de 1990), que ha fichado por el Ciudad de Ibiza tras frustrarse su fichaje por un club de la Primera División del fútbol boliviano.
El guardameta mallorquín se lo toma con filosofía. «Me he arriesgado y me ha salido mal, pero tengo la conciencia tranquila, porque hubiese sido peor quedarme en el San Rafael y dejar pasar una oportunidad tan buena», asegura Seral, que causó baja en el conjunto rafeler el pasado 29 de enero, a dos días del cierre del plazo del mercado de invierno, para iniciar una nueva aventura.
Sin embargo, las cosas, como suele suceder en muchas ocasiones, no eran tan bonitas como las pintaban en un primer momento. «Cuando vino el vicepresidente de la Liga de Fútbol Profesional de Bolivia nos dijo que era para fichar a cuatro o cinco jugadores de forma inmediata. Sin embargo, cuando mis representantes fueron para allá vieron que no era así y que, en todo caso, era un tema a medio o largo plazo. No tenía nada firmado y sabía a lo que me exponía, pero no nos dijeron la verdad», comenta.
Pero no se va a perder lo que falta de temporada y ya ha encontrado acomodo en el Ciudad de Ibiza. «No sé si es un paso atrás, pero las circunstancias se han dado así y era la única opción que tenía. Prefiero jugar en Regional antes que estar parado todos estos meses y que a nadie le quepa duda de que si voy a este club es para hacerlo con toda la ilusión del mundo», comenta.
Este mismo jueves, Javi Seral se incorporará a los entrenamientos del equipo que dirige David Torres. «La isla es pequeña y conozco a muchos de los jugadores de la plantilla. También tenía una oferta del Sant Jordi, pero me he decidido por el Ciudad de Ibiza y creo que he acertado, porque es un buen equipo y con serias opciones de lograr el ascenso», declara.