Paco Natera / Can Misses 2 ha vivido una de las historias de amor más bonitas que se recuerden en el fútbol pitiuso. En plena celebración de la presentación oficial de la Penya Blanc i Blava, todos los allí presentes fueron testigos de una especial pedida de mano que hizo llorar a más de un aficionado periquito.
El técnico, que cumple 11 temporadas al servicio de la entidad ibicenca, tiene 35 años, uno menos que su prometida, empleada de una conocida boutique infantil de Vila, y quiso demostrar el amor que siente por ella delante de sus amigos, familia y compañeros de la Penya Blanc i Blava.
“No se me ha ocurrido una mejor manera de expresar lo enamorado que estoy de Paula, con quien llevo saliendo 16 meses. La verdad es que ha salido todo muy bien y estoy muy contento porque ha sido toda una sorpresa para ella, que no se esperaba que le fuera a pedir matrimonio en un campo de fútbol, donde tiene muy buenos recuerdos, ya que creció en el del Sant Jordi, donde sus padres regentaban el bar”, afirma José Ramón Fayos.
Para Paula, ibicenca de Sant Jordi, ha sido un día inolvidable, al igual que para su futuro marido. “Pienso que la he hecho muy feliz y estoy muy contento, la verdad. Llevo preparando la pedida de matrimonio desde hace 5 meses y estoy muy orgulloso por cómo ha salido todo. Agradezco a la vida la oportunidad de haberla conocido. Estoy enamorado de Paula y quiero casarme con ella”, sostiene José Ramón Fayos, que, como no podía ser de otra manera, obtuvo el sí quiero de su novia.
“Y menos mal que no me dijo que no, porque imagínate la que se hubiera liado”, comenta el novio. “Ahora falta por poner una fecha, pero eso ya se lo dejo a ella”, añade Fayos, que será padre de un niño al que la pareja llamará José Ramón, como el progenitor. “Será nuestro mejor regalo de boda; Paula está embarazada de 24 semanas y estamos muy ilusionados”, finaliza.
Qué cursilada
Qué cursilada
Será q no te piden la mano ni por orden del juez
Será q no te piden la mano ni por orden del juez