Pompas Fúnebres Ibiza inauguró el pasado viernes su nueva sede en Formentera, reafirmando su compromiso por seguir ofreciendo el mejor servicio a las familias de Formentera en la despedida de sus seres queridos.
En la nueva sede, situada en Sant Ferran, las familias encontrarán un espacio amplio y mucho más acogedor, gracias a una nueva oficina totalmente reformada donde tendrán más comodidad e intimidad a la hora de preparar la mejor despedida a sus difuntos, ya sea un entierro en cualquiera de los cementerios de la isla, como una incineración o traslado.
Por otro lado, la gerente, Ana Marí, destacó la importancia de contar con instalaciones diseñadas para honrar el duelo de las familias, y comentó que “Formentera, pese a su bajo número de defunciones mensuales, en torno a las 5, se merece, y siempre ha tenido, un servicio excepcional, ya que no sería justo que, por su condición de doble insularidad, tuvieran que tener una despedida que se demorara más, o no tuviera el mismo nivel de calidad que en el resto de las islas. De ahí el compromiso de Pompas abriendo esta nueva y renovada sede”.
Marí también destacó la significativa reducción en el número de defunciones en 2023 en comparación con 2022, ya que se pasó de 76 a 53 difuntos (un 30% menos) y más cerca de las cifras de 2021 (60 difuntos). “Ha sido una dinámica similar a Ibiza. El 2022 tuvimos el Covid y sus consecuencias directas e indirectas se notaron”, relata.
Respecto a las formas de despedida de sus seres queridos, 3 de cada 4 formenterenses siguen eligiendo el entierro, frente a un 23% de incineraciones, una cifra algo superior a Ibiza.
Además, Marí subraya la diversidad de servicios que demanda hoy la sociedad, que más allá de la gestión de todos los trámites funerarios, también solicita, cada vez más, otros servicios como, por ejemplo, apoyo psicológico para las familias, o la personalización de las ceremonias con música, flores, o el de catering, que ayudan, tanto a reflejar mejor las vidas de los difuntos, como a brindarles un homenaje personalizado.
A la inauguración también asistió la consellera de Bienestar Social de Formentera, Maria Cristina Costa Juan, así como Andreu Ferrer, juez de paz, Fernando Bañón, párroco de la isla, y el equipo de trabajadores del sector funerario que se involucran en todo el proceso de despedida, quienes destacaron la importancia de esta labor «esencial para la comunidad».