@NataliaCárdenas / Este próximo lunes, 7 de mayo, debía celebrarse un juicio por delito de coacciones y hurto contra un ciudadano italiano residente en Ibiza que dejó en la calle, para especular con su vivienda, a una pareja con un niño de dos años estando ella embarazada en ese momento. Sin embargo, hoy el Juzgado se ha visto obligado a aplazar la vista puesto que el arrendador está ‘ilocalizable’ y no ha podido ser notificado por la Policía Nacional de la fecha del juicio.
Los hechos sucedieron en 2016 cuando esta pareja y su hijo alquilaron por 500 euros el salón del piso en el que vivía este hombre con su novia. Al llegar junio, el arrendador les dijo que si querían seguir viviendo allí debían abonar 3.000 euros al mes, ya que él podía alquilarlo por 125 euros diarios en verano.
El arrendador decidió entonces hacerles la vida imposible para que se marcharan. Les insultaba y ponía la música a todo volumen y les cortaba la luz, hecho que la inquilina grabó en vídeo y presenta como prueba. Además, tiene los recibos de haber pagado el alquiler y el ‘contrato’ de arrendamiento.
En plena temporada la pareja no encontraba otro sitio para vivir y fue a primeros de agosto, al llegar al piso en ses Figueretes, cuando se encontraron con algunas de sus cosas en la puerta de la calle y la cerradura cambiada. El arrendador se había quedado con todo lo de valor de la pareja.
Se quedó con los ahorros de la pareja, más un anillo de compromiso, el cochecito de bebé, ropa, pañales, etc., por un valor de alrededor de 4.000 euros. Al verse en la calle y sin nada, tuvieron que ir a parar a los bajos ‘patera’ de ses Figueretes, sin luz ni ventilación, condiciones desfavorables para la entonces embarazada y su hijo que es asmático.
Maldito desgraciado. Italiano tenía que ser. Espero que el peso de la ley recaiga en el con toda su fuerza.