L. F. A / Con los bares y restaurantes cerrados y con la prohibición de juntarse en casa con amigos o familia, las posibilidades de ocio se reducen y las excursiones de fin de semana se han multiplicado.
El problema es que muchos excursionistas se aventuran sin las medidas mínimas necesarias y, lo peor, algunos de ellos buscan lugares especialmente instagrameables y potencialmente peligrosos. En pocos días los Bomberos del Parque Insular de Ibiza han tenido que acudir a varios rescates, algunos muy complicados en Cap Nonó, Es Portixol , Cala Aubarca (d’Albarca) o en la llamada Cueva de La luz (Na Coloms), donde son desagraciadamente muy frecuentes.
La imagen que acompaña estas líneas fue tomada por un bombero (Elías Siscar) hace unos días en la zona de Cala Llentrisca. Afirma que había cola para sacarse una foto en el mismo punto. Esas imágenes les sacan de sus casillas.
«Estamos teniendo un aumento de rescates por el aumento de excursionistas en la montaña y similares. Ir a pasarlo bien al medio natural es genial y hoy en día es de las mejores cosas que se pueden hacer. Pero hay que ir preparado, utilizar el sentido común y no ponerse en riesgo«, indica el bombero Bruno Roig, que también ha compartido la imagen.
Richard Gutiérrez, experto senderista y organizador de rutas, se ha hecho eco también de estos hechos en sus redes y ha dado unas recomendaciones básicas:
1° Nunca vayan solos.
2° Lleven ropa e indumentaria adecuada.
3° Hidrátense y porten líquido suficiente para toda la excursión.
4° Controlen los tiempos; esto es, que calculen que podrán volver.
5° Infórmense de la previsión meteorológica.
6° Es recomendable conocer el terreno o informarse al menos.
7° Elija los recorridos que se ajusten a sus posibilidades.
8° Si no es capaz de seguir los 7 primeros pasos, contrate a un guía que le asesore.
Los bomberos llevan una racha tan intensa de rescates, que apuntan que sería mejor que se prohibiese el paso a algunas zonas, dado el enorme peligro que supone y el enorme consumo de recursos públicos que conlleva. Y es que hay que recordar que, ante una emergencia como esta, se ponen en marcha vehículos y personal de Bomberos, 061, Policías Locales, Guardia Civil… El Hospital Can Misses ha sufrido una enorme presión asistencial en enero y febrero por el incremento de casos de Covid y es ahora cuando comienza a dar un respiro.