@LauraFArambarri / La decisión de la aseguradora Asisa de rescindir unilateralmente el contrato de concertación con la Policlínica Nuestra Señora del Rosario ha dejado tirados no solo a pacientes con patologías en curso y a enfermos crónicos que están recibiendo un tratamiento de larga duración (de oncología, entre otras especialidades) sino a 466 personas mayores de 60 años (16 de ellas mayores de 90 años, de los que uno tiene 101 años) a los que resulta imposible acceder a otro seguro a su edad.
«Un drama», según lo ha calificado esta mañana David Medina, gerente del Grupo Policlínica, que ha explicado que están pendientes de la respuesta de Asisa a una petición de negociación que les han hecho desde Ibiza «para proteger a todas las personas desasistidas». «Todo esto tiene consecuencias legales que se estudiarán en el caso de que Asisa no rectifique su decisión», ha añadido.
El gerente de la Policlínica ha recordado que esta medida deja desasistidos en total a 2.800 asegurados tanto de póliza directa (2.000 personas) como de mutualidades de funcionarios (por los acuerdos de Asisa con las mutualidades de funcionarios Muface, El Isfas y Mugeju, que suman unas 800 personas) además de más 1.000 personas que residen o visitan Ibiza en los meses de verano y que figuran como pacientes desplazados y que también se quedarían sin asistencia.
Medina aseguró que el comportamiento de la aseguradora a la hora de dejar territorios desasistidos no solo afecta a Ibiza sino que, en Menorca, la clínica que atiende a los asegurados ha recibido un burofax similar al que han recibido en la Policlínica.
David Medina ha recordado que los hechos se remontan al 10 de octubre, cuando Asisa remite un burofax a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario, «en el que nos comunican la decisión de rescindir el contrato de concertación de servicios que manteníamos desde hacía 27 años, desde 1993. No se nos explican los motivos y, sencillamente, nos dicen que el día 31 de diciembre de 2019 darán por concluida la relación».
Medina ha querido subrayar la rotundidad del burofax. leyendo algún extracto como en el que dice: «a partir del 31 de diciembre daremos la relación por definitivamente finalizada y no habrán de prestar asistencia a nuestros asegurados y por nuestra parte no serán autorizadas ni abonadas asistencias a nuestros asegurados», ha leído (la Policlínica ha entregado la documentación por escrito a los periodistas). «La decisión de la compañía es que no van a dar cobertura a nadie más en la isla», lamentó Medina.
El gerente apunta que hay varios motivos por los que esta decisión es denunciable por parte de los afectados (incluso el Estado en el caso de los funcionarios), que podrían llegar a los tribunales si Asisa no da marcha atrás. Una es que incumplen el preaviso de tres meses del contrato porque se notifica el 10 de octubre un cese que se produce en diciembre. «Es cierto que Asisa ha rectificado y nos ha dicho que para las pólizas privadas el contrato finaliza el 31 de diciembre y para las pólizas de funcionarios finaliza el 31 de enero de 2020». Pero, de todos modos, «esto tiene unas consecuencias graves, ya que significaría que Asisa no se presenta de facto en la isla de Ibiza al concierto de las mutualidades Muface, Isfas y Mujeju en 2020 y 2021. Incumpliría por tanto los pliegos del concierto y obligaría a los funcionarios a contar solo con Adeslas a partir del 31 de enero de 2020».
«No podrían elegir de facto la compañía porque solo quedaría una, Adeslas pero es que, además, el objeto de los tres conciertos es muy claro: asegurar el acceso a asistencia sanitaria en el territorio nacional a los mutualistas y demás beneficiarios», ha leído Medina del contrato. Un párrafo que subraya que, si es nacional, «no te puedes presentar en unos territorios sí y en otros no». «Si Asisa se presenta es para todo el territorio nacional, no puede retirarse de la isla de Ibiza», ha subrayado. «Esta selección de territorios en función de las conveniencias económicas de la compañía implica que está incumpliendo los pliegos», ha lamentado Medina.
Las alternativas que ofrece Asisa a los pacientes hasta finales de año es acudir a los médicos de Palma de Mallorca. «Se hacen cargo del coste del desplazamiento o te gestionan la baja. Es decir, a partir de esa fecha no se sabe si continuarían haciéndose cargo del traslado. La desasistencia es completa, en nuestra opinión», denuncia el gerente.
La Policlínica asegura que han seguido atendiendo al 100% de los pacientes de Asisa que han acudido a la Policlínica. «A los funcionarios les atendemos sin más, mientras que a los pacientes de póliza privada les hacemos firmar un documento de cesión de derechos mediante el cual el único derecho que nos ceden es que, en caso de impago, podamos reclamarle a Asisa la asistencia que le hemos prestado».
Pendientes de una respuesta
La Policlínica Nuestra Señora del Rosario ha pedido a Asisa que cambie de postura y continúe dando asistencia en Ibiza. Precisamente están pendientes de una respuesta a esta petición que incluye unas condiciones: «No son económicas, sino únicamente basadas en exigir la continuidad asistencial, tanto para funcionarios como para asegurados».
«Les hemos pedido un contrato de cinco años con una prórroga de otros cinco más y un preaviso de seis meses. Todo ello para que no vuelva a ocurrir lo que ha pasado este año, que en octubre nos digan que se van en el mes de diciembre», ha explicado Medina.
También piden que Ibiza pase a ser considerada una isla de nivel 3 en los siguientes pliegos del contrato y no de nivel 2 como en la actualidad, porque se cuenta su población por municipios y no la del conjunto de la isla. De las 73 especialidades que tiene que tener el nivel 3, la Policlínica tiene 71, otra empresa oferta la número 72 (odontoestomatología) «y si nos exigen la que haría la número 73 (litotricia), la daríamos», abundó.
Dos escenarios posibles
A partir de ahora pueden pasar dos cosas. Que Asisa acceda a continuar con las condiciones que han pedido desde la Policlínica o bien que no lo haga. En este último caso la Policlínica va a pedir al continuidad asistencial para los pacientes de póliza privada que no se pueden cambiar de seguro, ya sea por temas de patologías o por tema de edad, y exigirán a las mutualidades de funcionarios que obliguen a Asisa a cumplir con el compromiso que tiene en 2020 y 2021.
La Policlínica tiene abierta una oficina de atención a afectados por la decisión de Asisa en el Vilaparc de lunes a viernes de 8 a 15.30 horas. Por allí ya han pasado más de 700 personas en estos días a los que han ayudado «en todo lo posible», subrayan.
Según le consta a la Policlínica, Asisa tiene unos beneficios de 20 millones de euros. «Para la Policlínica, Asisa supone un impacto total de menos de 4,5 por ciento. Esto no es un problema de dinero, es un problema de que se quedan 2.800 personas de la isla sin asistencia», ha concluido Medina.