@Noudiari / La Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca ha solicitado al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente que, de forma cautelar y preventiva se paralicen todos los expedientes de prospecciones sísmicas pendientes de resolver mientras se tramita la declaración de Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo (ZEPIM) el corredor de cetáceos que transcurre entre las costas de las Illes Balears, Catalunya y País Valencià.
Lo ha hecho durante la consulta previa a la futura Orden Ministerial por la cual se creará el ZEPIM del corredor de cetáceos, un hecho que la Conselleria considera una buena noticia que tiene que ir acompañada, sin embargo, de medidas preventivas como la moratoria de los expedientes de prospecciones.
La Conselleria valora la declaración de este espacio como espacio protegido como un paso necesario e imprescindible dirigido al cumplimiento de la Directiva Europea y la Ley de Patrimonio Natural y la Biodiversidad al ser el corredor de cetáceos del Mediterráneo una zona de presencia regular de especies incluidas en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial.
En la zona, sin embargo, se superponen diversos proyectos de prospecciones sísmicas que tienen una finalidad extractiva. La actividad de prospección, recuerda la Conselleria al Ministerio, es incompatible con los objetivos ambientales de la Estrategia Marina de la Demarcación Levantino-Balear y, sobre todo, con el establecimiento de un área marina el objetivo de la cual es la protección de los cetáceos.
Los efectos negativos del bullicio que causan sobre los cetáceos estos proyectos está sobradamente demostrado y constituye un impacto cuando se incrementa de forma constante. Los cachalotes son especialmente sensibles a estos ruidos y en las áreas próximas a las Illes Balears hay una notable población de esta especie clasificada como vulnerable en el Catálogo Español de Especies Amenazadas y consideradas en peligro, de los cuales se han descrito varamientos atribuibles a los sondeos sísmicos.
Por todo eso, la Conselleria recuerda que en el Proyecto Mediterráneo ya se proponía para este corredor de cetáceos, y otras zonas seleccionadas, una serie de recomendaciones y la adopción de medidas que sirvan para proteger estos mamíferos, entre las cuales destacan, la prohibición de vertidos, la regulación del tráfico marítimo y la regulación o prohibición de cualquier actividad relativa a la exploración, modificación o explotación del suelo y del subsuelo.
En este sentido, y además de apoyar firmemente la declaración del corredor como ZEPIM, la Conselleriaa solicita una moratoria de los expedientes sísmicos pendientes de resolverse.