Este verano los incidentes a bordo de los aviones han alcanzado niveles sin precedentes, según Michael O’Leary, CEO del grupo Ryanair. O’Leary atribuye este fenómeno al aumento de los retrasos de vuelos en toda Europa y al creciente número de pasajeros que consumen drogas además de alcohol. Ante este incremento, el jefe de la mayor aerolínea de bajo costo de Europa ha propuesto que se imponga un límite de dos bebidas alcohólicas en los aeropuertos de todo el continente. O’Leary, que ha explicado su postura en una entrevista con The Independent, tiene claro dónde está la conflictividad: «Los vuelos de Glasgow y Liverpool a Ibiza son los peores», ha señalado el empresario irlandés.
«Estamos observando cifras récord. Nosotros y la mayoría de las aerolíneas en Europa estamos viendo un aumento en el número de pasajeros descontentos a bordo, especialmente este verano.», señala O’Leary a The Independent. «El verdadero desafío es que los retrasos de vuelos están en su punto más alto este verano, lo que lleva a que las personas pasen tiempo en los aeropuertos consumiendo bebidas antes de embarcar.»
Las escenas de peleas, juerga -o incluso sexo– son ya una noticia habitual en los vuelos que cubren Reino Unido con Ibiza.
En una conferencia de prensa en Londres, Michael O’Leary dijo: «Es cada vez más común ver a pasajeros peleando entre ellos a bordo de los aviones. Ese es el mayor desafío con el que se enfrentan nuestras tripulaciones actualmente. Probablemente estamos lidiando con al menos un grave caso de asalto por semana ahora». Hace cinco o diez años, dijo, «eso habría sido casi nulo».
El uso de drogas ilícitas es, en parte, responsable. «Siempre habrás tenido pasajeros ebrios, pero los pasajeros ebrios generalmente se duermen,» explicó. Sin embargo, los pasajeros que están bajo el efecto de drogas y alcohol son mucho más inclinados a la agresividad.
Michael O’Leary señaló especialmente los vuelos de Liverpool y Glasgow a Ibiza como particularmente propensos a disturbios. «En cualquiera de nuestros vuelos a Ibiza no permitimos que nadie suba a bordo con botellas en absoluto – revisamos sus bolsos en la puerta de embarque,» afirmó. «Dios nos ayude, cuando éramos jóvenes e inocentes solíamos permitirles llevar botellas de agua, sin darnos cuenta de que estaban llenas de vodka. Ahora ni siquiera les permitimos llevar botellas de agua a bordo.», señala O’Leary al rotativo británico.
Jajjajaja.turismo de calidad
Seria facil hacer un test de alcoholemia antes de embarcar. El que da positivo, no vuela.
Quina mala baba. Pobres pilots 🤣🤣🤣
¿Y no se han planteado dejar de servir alcohol en los aviones?
No sé si seguirán sirviendo alcohol, en esos vuelos a veces no lo hacen.
Pero te puedes hacer una idea de lo efectiva que es la medida cuando también van drogados, con otras drogas diferentes al alcohol. Y esas seguro que no se sirven en el avión.
Como dicen arriba, hay que pasar controles anti doping.