EFE / NouDiari / El Govern balear ha decidido cerrar desde este viernes las 47 áreas recreativas gestionadas por el IBANAT (Instituto Balear de la Naturaleza) en Baleares para evitar riesgos sanitarios asociados a la masificación y al contagio de la covid-19, entre ellas las cuatro ubicadas en Ibiza y Formentera.
Se trata de las áreas de Sa Talaia en Sant Antoni; Can Cosmi en Sant Joan; S’Argentera en Santa Eulària y Can Marroig, en Formentera.
El Boletín Oficial de las Islas Baleares (BOIB) publicó ayer, jueves, una resolución de la consellera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, en este sentido.
La resolución establece que, para evitar cualquier tipo de masificación, se cierran estas áreas recreativas y se prohíbe el uso recreativo del fuego y de todas las infraestructuras hasta que la condición sanitaria lo permita.
La decisión se ha adoptado tras constatarse que el IBANAT, órgano gestor de estas zonas lúdicas, no tiene capacidad de control del aforo ni de cumplimiento de las medidas de seguridad para hacer frente a la pandemia, especialmente las referidas a la distancia entre los usuarios y al uso de mascarilla.
Son espacios recreativos donde poder cocinar y comer que son compartidos por varios grupos diferentes.
El acceso es libre, no hay barreras de acceso y los trabajadores del IBANAT ni puedan controlar el aforo de estos espacios, ni realizar tareas de desinfección de las infraestructuras.
Imposible cumplir las medidas de seguridad
Los usuarios de las áreas recreativas comparten las mismas infraestructuras, de forma que cocinan en los mismos fogones y comparten las mismas mesas, sin posibilidad de cumplir las medidas de seguridad establecidas contra la covid-19, especialmente la necesidad de mantener la distancia de seguridad, sobre todo entre personas no convivientes.
Hay que tener en cuenta que alguna de estas áreas recreativas tiene capacidad para acoger hasta un millar de personas, subraya la conselleria.
Hasta ahora se permitía el acceso de los ciudadanos a estas áreas recreativas, a pesar de que no se permitía el uso recreativo del fuego por motivo de la temporada de alto riesgo de incendios forestales, que finalizó ayer, 15 de octubre.
De todos modos, se habían precintado los lugares comunes como medida disuasoria. Aún así, en los últimos días ya se han registrado algunos episodios de masificación en estos espacios, circunstancia que ha motivado la petición de la conselleria de Medio Ambiente y Territorio.