En el año 2022 entraron en Ibiza 206.960 vehículos, lo que son cuatro veces más que dos décadas antes (51.000 en 2001). Al mismo tiempo, se ha disparado el parque de vehículos de la isla, que ya está por encima de los 1.036 por cada 1.000 habitantes. Es decir, más de un vehículo por habitante. Esta sobrecarga de circulación provoca colapsos, contaminación y presión sobre la red de carreteras de la isla, sobre todo en verano, por ello el Consell de Ibiza (en la línea en la que es pionera el Consell de Formentera) pretende revertir esta realidad gracias a la proposición de Ley que se debate esta mañana de martes en el Parlament y que supondrá —por primera vez en la historia de la isla— un control real en la entrada de vehículos. Aunque sus medidas se irán estableciendo de manera paulatina y, para 2025 y por lo que ha trascendido, solo entrará en vigor el control de entrada de autocaravanas y flotas de alquiler de empresas foráneas.
Será precisamente el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, el encargado de explicar hoy este y otros aspectos de la ley en su intervención en el último punto del pleno, aproximadamente a las 13 horas.
Así, la Ley para el control de la afluencia de vehículos en la isla de Ibiza, diseñada «para reducir el impacto medioambiental y mejorar la sostenibilidad turística en la isla», podría resumirse en seis principales medidas, la más importante de las cuales es la limitación de entrada de vehículos. Esto supone control y limitación a la entrada de vehículos a motor, especialmente durante la temporada alta (verano), cuando el tráfico y la congestión en la isla son más intensos. Pero durante la próxima temporada no se hará todavía de manera generalizada a vehículos de no residentes.
Así, en 2025 se pondrá en marcha el primer paso, un sistema de control sobre los vehículos de alquiler, de modo que se establecerá un límite anual al número de vehículos de este tipo que pueden ingresar a la isla.
Por otro lado, las caravanas y autocaravanas tendrán la obligación de presentar una reserva de plaza en uno de los campings de la isla para poder desembarcar en Ibiza.
Todo este sistema de control deberá hacerse con las navieras, ya que el barco es el medio de transporte en el que entran en la isla los vehículos objeto de esta regulación. Por ello habrá obligaciones de información para empresas navieras: Las empresas que transportan vehículos a la isla deberán cumplir con requisitos específicos de registro y verificación.
Otro punto importante de la ley es fomentar una movilidad más sostenible y menos contaminantes, por ello la ley afirma que se incentivará el uso de vehículos eléctricos y de transporte público, así como de otros medios de transporte alternativos.
Como toda ley, esta tiene su régimen de inspección y sanción que supone un sistema de inspección para supervisar el cumplimiento de las normativas y sancionar las infracciones.
La ley plantea también un sistema de excepciones en casos específicos, como movilidad esencial entre las Islas Pitiusas y situaciones especiales.
Sanciones
El régimen sancionador propuesto incluye multas para los infractores, con penalizaciones específicas para aquellos que superen los límites de entrada de vehículos o que no cumplan con los requisitos de sostenibilidad (como el uso de vehículos contaminantes o sin autorización para circular en la isla).
Esta propuesta se inspira en legislaciones similares aplicadas en la isla de Formentera y está alineada con las regulaciones autonómicas, estatales y de la Unión Europea sobre sostenibilidad y control del tráfico en zonas turísticas.
Amics de la Terra: «seguiremos con atascos y saturación»
El grupo ecologista de Ibiza Amics de la Terra celebra la aprobación de la ley para reducir la afluencia de vehículos en las carreteras de la isla pero considera poco ambicioso que el Consell de Ibiza limite el control de entrada solo a autocaravanas y coches de alquiler, «ya que esto no tendrá un impacto notable en 2025, y seguiremos con atascos y saturación en nuestras vías». Además, alertan de que «todo depende de los criterios que el Consell aplique para establecer el techo de vehículos de alquiler y, en el futuro, el número de coches de turistas que se permitirá».
«Lamentamos que no veremos la efectividad de esta medida legal durante la temporada de verano de 2025. Recordamos que las autocaravanas no son las responsables de la saturación de las redes viales», añaden en un comunicado.
Para los ecologistas es evidente que la política de construir nuevas carreteras y ampliar las existentes no reduce el problema. «La prueba es que, a pesar de la construcción de las famosas autopistas entre 2005 y 2006 y el desdoblamiento de la carretera Ibiza – Santa Eulalia, el problema no se ha resuelto», remarcan.
El problema de fondo, para Amics de la Terra, «es la política de crecimiento, tanto de plazas turísticas como de población en general. La sobrecarga de la red vial es solo un síntoma de una enfermedad: una política equivocada que conduce al colapso y hace imposible una buena gestión sostenible».
El próximo paso lógico, a su juicio, «será la reducción de plazas turísticas y una limitación drástica en la construcción, ya que nuestro territorio no tiene espacio suficiente para más infraestructuras ni recursos naturales.»
También consideran clave dar prioridad a una mejora drástica del transporte público. «Mientras no constituya una alternativa válida, estamos obligados a desplazarnos en coche», subrayan.
JAJAJAJA, justo lo que decia yo ayer… que no entren tampoco coches de alta gama y cilindrada que contaminan como un avion y solo sirven para pasear 4 chulos y cargamentos de putas, que esta quedando ibiza como un prostibulo enorme