@Noudiari/El 71% de los residuos recogidos este verano en el litoral de Sant Josep han sido plásticos, según los resultados difundidos por el Govern balear sobre el programa de limpieza realizado este verano en las Pitiüses.
Un total de diez embarcaciones, ocho en Ibiza y dos en Formentera, han recogido entre mayo y septiembre más de 30 toneladas de residuos, de las cuales 26.036 kilos corresponden a Ibiza y 4.403 a Formentera.
Por municipios, aunque Sant Josep es el que más plástico tiene en sus costas, no es donde más residuos se han encontrado. El primer puesto se lo lleva Santa Eulària, con 9.995 kilogramos de basura, le sigue Sant Antoni con 7.307 kilos, después Sant Josep con 4.832 kg, en cuarto lugar Vila con 2.786 kg y por último Sant Joan, con 1.115 Kg.
De esta forma, al igual que en Sant Josep el residuo más común es el plástico, con un 71% del total, es decir, con 3.430 kilogramos de plásticos recogidos este verano, en el caso de Santa Eulària el residuo más común es la vegetación, con un 44,97% del total recogido, es decir, 4.494 kilos recogidos. Lo mismo ocurre en Sant Antoni donde el porcentaje es un 43%, muy seguido en un segundo lugar por el plástico, que supone un 38% del total de los residuos encontrados.
En Vila, el plástico también ha sido el residuo más encontrado, en un 36%, seguido de cerca por la vegetación en un 33%. En Sant Joan, el residuo más numeroso ha sido la madera, con un 43% del total.
En Formentera, de los 4.403 kilos encontrados, el residuo más numeroso es también la madera, en un 39%, mientras que el plástico y la vegetación van en un segundo lugar, con un 22% cada uno.
Basura del norte de África
En la presentación de los datos, el director general de Educación Ambiental, Calidad Ambiental y Residuos, Sebastià Sansó, ha destacado que mucho de lo que se ha recogido este verano proviene del norte de África donde «se ha exportado nuestro modelo de consumo pero no de gestión de los residuos».
En este sentido, ha anunciado que está en contacto con el director general de Cooperación con el fin de colaborar en la construcción de un vertedero en Argelia o en Marruecos.