@C. Vidal / Después de la tempestad, viene la calma. También en materia educativa. Ésa es la principal conclusión del Anuari de l’Educació 2015, presentado este lunes en Ibiza por Carmen Orte, catedrática de la Universitat de les Illes Balears y directora de la publicación, que destaca que «después de una anterior legislatura muy conflictiva en materia educativa, a partir de ahora se debe recuperar la normalidad».
Por delante, eso sí, hay varios problemas, como el fracaso escolar, la idoneidad de los alumnos o la tasa de escolarización en la enseñanza no obligatoria, capítulos en los que Balears está muy alejado de la media estatal. «Si dejamos atrás el conflicto, se puede empezar a retomar diferentes proyectos que, en los últimos años, se habían dejado de lado, para ofrecer una mayor calidad educativa», asegura la directora del anuario, que aboga por un gran pacto educativo «que ponga las bases para una profunda renovación del sistema educativo en Balears».
Entre esos proyectos, que aparecen publicados en el número 12 del Anuari de l’Educació, figuran dos con nombres y apellidos ibicencos. Las docentes Beatriz Pérez y Angels Martínez fueron las encargadas de presentar sus respectivos trabajos sobre la enseñanza de las lenguas clásicas (latín y griego) con las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y las necesidades específicas de apoyo educativo en Ibiza, respectivamente.
«En el artículo hemos querido mostrar como el alumnado de 4º a 2º de bachillerato va adquiriendo y aumentando sus competencias en las nuevas tecnologías, al tiempo que transforma la perspectiva con la que se acercan al estudio del pasado y, en definitiva, actualiza el significado del término clásico», afirma Pérez, profesora de Blancadona.
Por su parte, Martínez, tutora del aula de educación especial de la escuela de Sant Ciriac e integrante de la comisión del Consell escolar de Eivissa sobre las necesidades educativas especiales, señaló que «el objetivo final del trabajo era poder trasladar unas conclusiones, por las que se realizó un cuestionario entre las escuelas, instituciones y asociaciones relacionados con la Educación Especial (NESE). Entre otras cosas, todos coincidieron en la necesidad de ampliar el servicio de orientación en centros de infantil y primaria, aumentar el personal especialista para atender el alumnado NESE, mejorar y ampliar el transporte adaptado, la supresión de las barreras arquitectónicas, un modelo de escuela inclusiva y, en definitiva, contar con la suficiente dotación presupuestaria».
En cifras
En el Anuario de l’Educació no podía faltar, lógicamente, los datos del sistema educativo no universitario en Balears durante el curso 2014-15. Las cifras, en muchos de los casos, siguiendo la tendencia de años anteriores, son mucho peores que en el resto de España. Los alumnos matriculados en las enseñanzas de régimen general son 175.788, 1.474 menos que en el curso anterior, lo que supone una variación de -0,8%, uno de los descensos más elevados de todo el estado.
También presenta las tasas más altas de alumnos extranjeros, principalmente en los centros públicos. Hay contabilizados un total de 27.202 alumnos extranjeros (14,2%), seguido por La Rioja (13,6%) y Catalunya (12,1%). Las tasas de escolaridad están por debajo de la media estatal, tanto en el primer ciclo de educación infantil como en secundaria que, por ejemplo, llega a ser 25 puntos más baja a los 18 años (55,1).
Las bajas tasas de graduación en todos los niveles de secundaria es un hecho característico del sistema educativo balear, sobre todo en un contexto laboral terciario y estacional. El indicador de abandono escolar entre los jóvenes de 18 a 24 años es el más alto a nivel estatal, con un 32,1%, seguido, de lejos, por Andalucía (27,7%). En 2015, sólo un 28,7% de la población activa de Balears tiene estudios universitarios, lo que supone una tasa 8,7 puntos más baja que la estatal. También es muy baja la tasa de idoneidad de los estudiantes y, según datos del curso 2012-13, era de 91,1% en alumnos de 8 años (93,6% estatal), 85,2% a los 10 años (89,4%), 78,2% a los 12 años (84,4%), 64,8% a los 14 años (70,6%) o 56,3% a los 15 (62,5%).
«Parece que la lengua era los único importante en esta comunidad en la anterior legislatura y que estar en la cola de la media estatal no nos preocupaba demasiado. Ahora podemos pensar en eso y ponernos manos a la obra para recuperar la normalidad educativa e intentar buscar soluciones a todos esos problemas. Poner sobre la mesa la educación como prioridad es estar orgullosos de nuestro trabajo y no pensar que los maestros somos un problema, sino una solución», añade Carmen Orte.
¿pero no quitado el TIL, las banderítas, el catalán vuelve a inundidarlo todo? ¿Qué buscan? ¿Menos horas aún? ¿Más dinero de los 4 mileuristas que aún tienen la suerte de trabajar 12 horas al día?
Una vez iniciada la fiesta no hay quien lo pare esto ya es un after…. verde.
Es una vergüenza. Pedir personal para atender los niños con discapacidad, para que no hayan aulas masificadas, que hayan autobuses escolares suficientes para quien lo necesite… A quién se le ocurre, verdad?
si si, justamente esos fueron los primeros temas que se abordaron en respuesta a las manifestaciones como las que se muestran en la foto de portada. Lo triste es que por otras cosas paralicen la educación, y por las importantes, pues ya se volverá a la normalidad…. Viva la hipocresía.
precisamente gracias a las manifestaciones se recuperaron becas de comedor y autobús. Y ahora nos guste o no están empezando a conceder algo más de personal, que llevamos unos años lindos lindos.