@L.Aversa/ El proyecto del aparcamiento subterráneo elaborado por el empresa de arquitectura Urbex y descartado por Autoritat Portuària de Balears (APB) contemplaba un total de 435 plazas de aparcamiento, de los cuáles 141 se reservaban para residentes y el resto, 294 plazas, se destinarían a rotación.
El proyecto que apoya el Colegio de Arquitectos de Ibiza y Formentera más allá del rechazo del ente portuario, prevé ubicar aparcamientos bajo el Martillo para los vecinos, una propuesta muy diferente a la que defiende Autoritat Portuària, que quiere desplegar plazas en superficie para destinarlas a las marinas privadas de yates de lujo que operarán en la zona.
En concreto, el proyecto que defienden los arquitectos consiste en la creación de 148 plazas desplegadas desde el monumento al marinero hasta el Martillo, bajo la calle Lluis Tur i Palau, una zona conocida como muelle interior. Bajo esta calle, 76 plazas se ubican junto al cantil y las otras 72 se localizan en el lateral más cercano a la fachada marítima. El diseño de este aparcamiento subterráneo cuenta calle central cuyo acceso se contempla desde el monumento al marinero y conduce hacia el Martillo.
140 plazas de rotación y 141 para los residentes
Bajo la plataforma del Martillo, la propuesta prevé un total de 287 plazas: 6 para discapacitados, 140 de rotación y 141 para los residentes. Las plazas para los vecinos se ubicaban en el centro y en el lateral Este, y se integraban en el total de seis hileras de aparcamientos que se contemplan bajo la plataforma, conectadas por tres calles. Dos filas en los laterales y cuatro en el centro se combinan con otras dos pequeñas hileras ubicadas en el fondo y en el inicio del Martillo, que a su vez agregan unas 15 plazas cada una.
El proyecto también contempla la posibilidad de enterrar totalmente el aparcamiento o de elevarlo 0,50 metros desde la cota cero. En superficie, la recuperación del pavimento de piedra, la creación de un carril bici y del vial restringido, forman parte de la propuesta arquitectónica.
Cabe recordar que este proyecto ya ha sido presentado ante Autoritat Portuària, que el pasado 24 de noviembre remitió una carta a la empresa Urbex argumentando que el mismo es inviable técnica y económicamente.
Aún así, el Colegio de Arquitectos mantiene que es viable y reivindica que las instituciones deben financiar su construcción.