@D.V./ El Ayuntamiento de Santa Eulària se opondrá a cualquier pretensión de convertir el faro de Tagomago en una instalación turística. Así lo ha asegurado a esta mañana a Noudiari después de la publicación en Periódico de Ibiza de que Autoridad Portuaria de Baleares (APB) había recibido una solicitud por parte de una empresa para convertir esta instalación en un hotel.
“En el Ayuntamiento no tenemos constancia de ningún proyecto ni nadie se ha dirigido a nosotros para informarnos”, dicen desde el Consistorio, que insiste en que su postura es la que expresó el viernes pasado el alcalde, Vicent Marí, en el pleno municipal. “Estamos totalmente en contra de que el islote de Tagomago se explote turísticamente. Y esto incluye tanto el quiosco del muelle como también el faro, evidentemente”.
Ahora, el Ayuntamiento de Santa Eulària está a la espera de que Autoridad Portuaria de Baleares le comunique el proyecto y que le solicite un informe. “Y este documento solo tiene una dirección posible, y es que estamos completamente en contra”, apuntan desde el Consistorio.
Zona de nidificación
Una opinión que comparte también el grupo ecologista GEN-GOB Eivissa. Así, su portavoz, Joan Carles Palerm, recuerda que el faro se encuentra muy cerca de la zona de nidificación de las colonias de virots y halcones marinos, y que la instalación de un hotel en ese punto sería muy desaconsejable: “Todo lo que sea añadir presión humana a un espacio como Tagomago es un error”, afirma.
Palerm recuerda que una infraestructura turística comporta “servicios, personal, consumo de agua, ruidos y aumento de desechps” y que, además, se sitúa en un entorno natural extremadamente frágil. “El faro sería un espacio magnífico para instalar un centro de interpretación de Tagomago”, comenta el portavoz del GEN, quien aboga por limitar las visitas a este espacio.
Recordemos que este proyecto de negocio en el faro de Tagomago se incluye dentro de la iniciativa impulsada por Puertos del Estado para reutilizar faros en desuso y reconvertirlos en establecimientos turísticos de alta gama. En su momento, el Grupo de Empresas Matutes presentó un proyecto para reconvertir el faro de sa Conillera en un hotel-boutique y Noudiari ya informó de otros proyectos parecidos en el faro de Botafoch y en el de la Mola de Formentera.