@D.V./ Los técnicos del Ayuntamiento de Vila han decidido desestimar todas las alegaciones que los vecinos del paseo Joan Carles I habían presentado contra la apertura de la discoteca Bomba Ibiza. Así se lo harán saber hoy al concejal de Urbanismo Alejandro Marí en la reunión que tendrán durante la mañana de este viernes, con lo que se dará un paso decisivo para que este local de ocio pueda abrir sus puertas. Según ha confirmado Alejandro Marí, la próxima semana se llevará a la Junta de Gobierno la licencia de instalación y, posteriormente, se tramitará la licencia de obra.
Marí no ha querido aventurarse sobre si la discoteca podrá abrir sus puertas antes del inicio del verano, ya que eso depende de la celeridad con la que se hagan las obras de reforma, aunque ha asegurado que tras el visto bueno de los técnicos y la desestimación de las alegaciones, “la luz verde está asegurada”.
Una licencia «reversible»
El principal problema que comporta la licencia de Bomba Ibiza es que el Plan General de Ordenación Urbanística de Vila que se aprobó en el año 2009 prohibe la apertura de nuevas discotecas en el municipio. Hay que matizar que el edificio donde se instalará Bomba ya había funcionado como discoteca bajo el nombre de Heaven o Angels, pero cuando los antiguos propietarios realizaron unas obras ilegales perdieron su licencia correspondiente. Ahora, los nuevos dueños han recuperado la licencia antigua porque se han comprometido a demoler las obras ilegales y devolver el edificio al estado original.
“Se trata de una interpretación que hacen los técnicos, es su criterio, pero se ajusta a la legalidad y, por tanto, en este aspecto poco más se puede decir” comenta el regidor de PSOE-Pacte, Marc Costa, quien no se muestra partidario de la apertura de la discoteca. Los reparos de los progresistas no se centran en los aspectos legales del tema, sino que van más allá: “Se trata del modelo de ciudad que queremos tener”, asegura Costa, “cuando elaboramos el nuevo PGOU llegamos a la conclusión de que Vila no es un lugar idóneo para instalar una discoteca de grandes dimensiones”. Costa también señala que la zona de Joan Carles I es eminentemente residencial, con vecinos preocupados por los ruidos y las congestiones de tráfico que provocará la nueva instalación: “Ahora mismo, lo último que necesita el Paseo Marítimo es esta discoteca”.
Una vez confirmado que en pocos días recibirán la licencia, la apertura de Bomba Ibiza sólo depende de la celeridad con la que los propietarios afronten sus obras de reforma. La discoteca había anunciado su apertura el pasado día 22 de mayo algo que, obviamente, ya no es posible. Tras este negocio se encuentra el empresario italiano Guiseppe Cipriani y, entre los nombres de los disc-jockeys que se habían anunciado para pinchar este verano, estaban Erick Morillo y Luciano.
Si han de punxar Eric Morillo y Luciano, per sa meva part, ja poden fer ses obres prou ràpid com per què s’edifici faci pinya amb ells a dins.