EFE / @Vicent Torres / La Comisión de Justicia del Congreso ha aprobado hoy, con 28 votos a favor y 9 en contra, el informe de la ponencia sobre la reforma del Código Penal que tipifica como delito huir del accidente después de haberlo causado, que se castigará con hasta cuatro años de cárcel, y el aumento de penas a los conductores homicidas, en especial los que cometan imprudencias bajo los efectos del alcohol y las drogas.
Es el penúltimo paso en el Congreso de la proposición de ley de reforma del Código Penal, que será previsiblemente aprobada en el Pleno de la Cámara Alta este mismo jueves antes de pasar al Senado.
Más de un año después de que la iniciativa se tomara en consideración, los principales grupos han dado su visto bueno al texto discutido en la ponencia, salvo el de Unidos Podemos, al entender que el Código Penal deber reservarse para los ilícitos más graves.
Si se mantiene el sentido de voto de hoy, el Congreso respaldará el jueves que se agraven las penas de las imprudencias al volante, en especial las derivadas del exceso de velocidad y el consumo de alcohol y drogas, y que sea delito el abandono del conductor después de causar un accidente.
La lucha iniciada por Anna González
Todo ello después de la lucha que por conseguirlo inició Anna González, quien perdió a su marido en 2013 tras ser arrollado con su bicicleta y darse a la fuga el conductor. La conducta de éste quedó impune al encontrarse la víctima ya fallecida.
La proposición, como reza en su exposición de motivos, responde a una demanda social ante el incremento de accidentes en los que resultan afectados ciclistas y peatones por la imprudencia de los conductores.
Y subraya que, en el caso del abandono, lo que se quiere castigar es «la maldad intrínseca de quien sabe que deja atrás a alguien que pudiera estar lesionado o incluso fallecido y la falta de solidaridad con las víctimas».
Durante la sesión de hoy, se ha incluido una enmienda «in voce» para incluir que las imprudencias menos graves al volante con resultado de lesiones leves pasen a castigarse por vía penal y no administrativa como hasta ahora.
Se trata de incluirlas en el Código Penal, de donde fueron sacadas en la reforma de esta ley en 2015.
Viñals y Patricio, dos familias unidas por la desgracia
La desgracia unió a las familias de los desaparecidos Dani Viñals y Vanesa Patricio. Dos ibicencos que tuvieron la mala fortuna de circular, uno en su bicicleta y otra con su coche, en el momento en el que la fatalidad marchaba en dirección contraria.
En ambos casos, substancias como el alcohol o las drogas fueron hallados en el organismo de los conductores implicados en los accidentes. Esta mala fortuna hizo que ambas familias caminaran juntas en la persecución de mayores penas para estos delitos.
Llegaron a reunir 300.000 firmas que entregaron al congreso de los diputados junto a otros de los afectados reclamando un cambio legislativo que parece que ya ha tomado forma.