No solo los detectives se infiltran en las fiestas pirata de Ibiza para detenerlas o denunciarlas. Hay otros infiltrados organizados por el Consell de Ibiza. Así, para combatir la competencia desleal en el sector del transporte de viajeros en Ibiza «de manera más efectiva», el Consell de Ibiza ha apostado por nuevas maneras de actuación y utilizar personas infiltradas es una de ellas.
Esta medida se suma, «a la colaboración de las policías locales y de los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado, que es esencial para reducir esta problemática y demostrar a los infractores que la impunidad se ha acabado”, ha manifestado el vicepresidente segundo y Conseller de Transportes, Javier Torres.
Así, la institución insular tiene a personas infiltradas en los grupos de WhatsApp y de Telegram y en páginas web donde se ofrecen servicios ilegales de transporte.
«En la primera intervención con una persona infiltrada por el Consell Insular de Ibiza, en noviembre del año pasado y que sirvió como prueba piloto, participaron agentes de la Policía Local de Sant Josep», explican.
En este caso, la persona infiltrada por la institución insular contrató un servicio con un taxista ilegal para ir de Sant Josep al aeropuerto. Cuando el supuesto cliente entró al vehículo, el conductor ilegal le dijo que no hacía falta utilizar la mascarilla (a pesar de que es obligatoria en el transporte público) y le pidió el pago del servicio, 30 euros, antes de finalizar el trayecto«, relatan.
De camino al aeropuerto, un control de la Policía Local de Sant Josep obligó el conductor sin autorización a parar su coche. Los agentes comprobaron que no tenía la ITV en vigor, que el pasajero no llevaba el cinturón de seguridad y, cuando la policía se dirigió al ‘cliente’, este dijo que había pagado por el servicio, alertando al policía de que se trataba de un servicio de transporte sin licencia.
Después de la interposición de la denuncia (que supone una sanción de 6.001 euros) y de la inmovilización del turismo, el taxista denunciado se puso en contacto, por WhatsApp, con el cliente, la persona infiltrada por el Consell. El conductor ilegal se quejó de la “poca colaboración” que había mostrado y le recordó que ya le había dicho que si les paraba la policía, «tenía que explicar que se trataba de un amigo que lo llevaba al aeropuerto gratis».