EFE / El conseller de Educación, Martí March, ha afirmado este martes que no está de acuerdo con dar un aprobado general a los estudiantes debido a la crisis de la pandemia de la COVID-19, pero sí de evaluarles con «flexibilidad».
«Ésta es la cuestión: ni podemos dar un aprobado general, con lo que estoy en contra, ni tampoco evaluar a los alumnos como se hace normalmente», ha respondido March a una pregunta del PP.
El conseller ha aclarado que en la reciente Conferencia Sectorial de Educación ningún consejero ni la ministra plantearon el aprobado general para los estudiantes. De lo que se habló es de «flexibilización», ha apostillado.
Por tanto, los equipos docentes deberán responder «desde la flexibilización» para que la mayoría de alumnos promocionen y repitan el menor número de estudiantes.
Con ocasión del pleno del Parlament, el conseller ha dicho que la actual situación educativa «nunca se había planificado», por lo que la comunidad educativa ha tenido que hacer frente a una nueva coyuntura jamás vivida.
March le ha extendido la mano al PP para trabajar juntos en favor de los estudiantes.
Por su parte, la diputada Núria Riera ha advertido que esta crisis no puede ser una «excusa para cargarse la cultura del esfuerzo, ni la ilusión de los estudiantes para aprobar materias y superar el curso».
Riera ha preguntado al conseller si ha pensado que los estudiantes y las familias se verán «medio año», hasta el próximo curso, en sus casas sin poder conciliar vida educativa, familiar y laboral.
El PP está dispuesto a colaborar con la Conselleria de Educación, pero Riera ha pedido al Govern y al conseller que «se comprometa a reforzar el presupuesto educativo, aquí y ahora».