Nahuel L. A./ El Centro de Estudio y Prevención de Conductas Adictivas (CEPCA) ha evidenciado un descenso en el consumo de drogas entre los chicos de entre 14 y 18 años. Sin embargo, el consumo de marihuana se ha equiparado al del tabaco entre los adolescentes de Eivissa: el 32,8% fuman tabaco y el 32,3% consumen cannabis.
Así lo ha indicado CEPCA esta mañana durante la presentación de la memoria correspondiente a 2012 y ha reconocido que en futuras campañas de concienciación que elaboran en las escuelas harán especial hincapié en reducir el consumo de esta sustancia. La directora de CEPCA, Belén Alvite, ha recalcado que queda «mucho por hacer». Así, ha destacado que el consumo de cannabis es como «adquirir más números para ganar la lotería» que premia con una enfermedad mental. «Es como la ruleta rusa», ha señalado Alvite que ha matizado que el consumo en sí no tiene por qué generar un trastorno, pero que es evidente que nadie conoce su predisposición genética a sufrir una enfermedad de esta índole.
En este sentido ha señalado que mientras que un adolescente no consumidor de esta droga busca estrategias personales para resolver los problemas que suele tener en su entorno, un consumidor recurre a la marihuana y con esta acción «produce una parada en el proceso de maduración: se quedan en stand by» y ha recalcado los efectos negativos de esta sustancia en la memoria a corto, medio y largo plazo.
Asimismo, ha indicado que los consumidores habituales de marihuana suelen dar las mismas respuestas a los problemas que «cuando tenían 15 años». «Les llamo los eternos peter panes«, ha explicado la directora del CEPCA porque considera que «no han madurado por su falta de uso de otro tipo de habilidades» para solucionar los conflictos. «Hay un síndrome de apatía que se genera cuando uno consume mucha cantidad y durante mucho tiempo a lo largo de su vida», ha asegurado Alvite que ha añadido que esta gente «empieza a tener una especie de gabardina puesta que escupe el agua y nada le cala: que no le importa nada y no son conscientes de lo que les ocurre».
Las chicas consumen más que los chicos
Las conclusiones del CEPCA confirman que el consumo de estupefacientes sigue vinculado estrechamente al ocio nocturno y los fines de semana e indica que existen «importantes diferencias de género» en el consumo de alcohol y tabaco en estas edades (7,8% y un 9% superior en las mujeres que en los hombres, respectivamente).
En la presentación de esta memoria sobre conductas adictivas, para la que se ha encuestado a 3.164 alumnos de los centros de Eivissa (el 84,7% del alumnado de entre 14 y 18 años), ha estado presente la consellera de Bienestar Social, Mercedes Prats, acompañada por la coordinadora de este estudio, Belen Alvite, y el jefe de sección del CEPCA, Javier Villar.
Prats ha señalado que el trabajo del CEPCA es «de largo recorrido» y ha querido remarcar que, entre adolescentes, no se puede hablar de uso de drogas, sino de «abuso». En este año se ha ampliado el número de preguntas del cuestionario de 45 a 74 para elaborar los posteriores informes, basándose en el mismo formato que utiliza el Plan Nacional Sobre Drogas (PNSD).
El estudio, que ha incorporado el uso de tranquilizantes que sólo se pueden adquirir mediante prescripción médica, constata la bajada del hábito de consumo en todas las sustancias sobre las que se ha preguntado (alcohol, tabaco, cannabis, cocaína y alucinógenos). Asimismo, también se ha constatado un retraso en las edades de inicio en el consumo de drogas que se sitúa debajo de la media nacional a excepción, claro está, de la marihuana.
Finalmente, la institución ha alertado del acceso que los menores tienen sobre ciertas drogas tanto legales como ilegales y ha denunciado que aún hay «cierta tolerancia social» al consumo de alcohol, tabaco e, incluso, marihuana.
Vaya tres, no han pegado sello en su vida pero siguen en el candelero. Con la gente válida que hay en el mundo y tener que aguantar a estos individuos.
Vaya tres, no han pegado sello en su vida pero siguen en el candelero. Con la gente válida que hay en el mundo y tener que aguantar a estos individuos.