@Noudiari/El hombre español de 58 años detenido por el incendio en el edificio de viviendas de Sant Antoni se niega a declarar ante la Guardia Civil y pasará mañana a disposición judicial, según ha informado hoy el instituto armado.
El detenido, que al parecer vivía de alquiler en la habitación de uno de los pisos del inmueble, se entregó ayer lunes a la Policía Local de Sant Antoni mientras el edificio estaba en llamas.
También llamó al Servicio de Emergencia 112, al que comunicó que era propietario del inmueble y que lo había quemado voluntariamente, según informó un portavoz de prensa.
Ahora, se niega a declarar ante la Guardia Civil que se ha hecho cargo de la investigación, y que tiene previsto trasladarlo mañana a los juzgados.
La mayoría de los desalojados podrá regresar al edificio
En cuanto a las 28 personas desalojadas, el Ayuntamiento de Sant Antoni ha asegurado que la mayoría podrá regresar esta tarde a sus viviendas. No lo podrán hacer los habitantes del piso donde comenzó el incendio, en la primera planta, y el que está ubicado arriba, en la segunda planta, ya que han sido los más afectados por el fuego.
Así lo determina el informe técnico municipal, que permitirá que la Guardia Civil desprecinte la mayoría de los pisos, para que sus habitantes puedan regresar y valorar el estado de las mismas, para decidir si ya pueden volver a ocuparlas.
La concejala de Gobernación, Aida Alcaraz, ha explicado que de los 28 desalojados, doce durmieron anoche en el Polideportivo de Ses Païsses, donde se les ha facilitado material higiénico y comida, además de hacer uso de los servicios municipales. El resto se alojó en viviendas de familiares.
La edil ha asegurado que las doce personas que necesitaron de la asistencia municipal, y que corresponden a tres familias, no se alojan en los pisos que continuarán precintados, por lo que podrían regresar a sus viviendas.
Según ha podido saber Noudiari.es, el hombre que inició el fuego bebía y llevaba meses sin pagarle la habitación a una señora mayor que lo había acogido, casi por caridad. Debido a los problemas con la bebida y los impagos, la mujer lo echó del piso, pero el hombre volvió y prendió fuego a la vivienda.