@Pablo Sierra del Sol / La Sociedad Deportiva Formentera se enfrentará mañana (19 horas) al Sevilla Fútbol Club con la ilusión del niño que recibe los regalos de Reyes con seis semanas de antelación. Hablar con Tito García Sanjuán es charlar con un entrenador extramotivado ante el partido más importante de su trayectoria en los banquillos. También será un duelo inolvidable para su plantilla, nombres modestos del balompié español, gente que se ha curtido la piel en los campos de Segunda B y Tercera, y que ahora tienen la oportunidad de enfrentarse en dieciseisavos de final de la Copa del Rey a un club que ha ganado cinco veces la Europa League en los últimos diez años. Como más de un jugador formenterense es andaluz y, encima, sevillista de corazón, la emoción se multiplica hasta el infinito.
«Veo a mis futbolistas muy concienciados ante la importancia del partido que van a disputar y de lo que supone medirse al Sevilla. Que durante las últimas semanas hayan recibido llamadas de medios nacionales no lo veo nada negativo. Para ellos es una ilusión enorme y un premio a los años que llevan dedicados al fútbol. Para Juan Antonio, por ejemplo, que un diario de su tierra le haya hecho un reportaje recordando que su padre jugó 30 partidos con el Sevilla en Primera es algo precioso», explica Sanjuán.
Desde que perdiera el pasado fin de semana su primer partido en lo que va de Liga (competición en la que los pitiusos son terceros), el maño solo ha tenido ojos para su rival de mañana. «Ahora sí que puedo hablar del encuentro contra los de Sampaoli», comenta el entrenador, «y es obvio que no es sencillo medirse siendo un club modesto contra uno de los mejores equipos del mundo. Lo importante, por encima del resultado, es que demos muy buena imagen, que sepamos competir. Tenemos una plantilla corta, pero afortunadamente llegan todos bien. La única duda que tengo es Liñán, con una sobrecarga».
Para Sanjuán, que no es de hacer rotaciones, independientemente del once que ponga sobre el césped del Municipal de Sant Francesc el argentino Jorge Sampaoli, los rojinegros tendrán que vérselas contra un rival temible, que ha empezado como un tiro en Primera, donde es tercero con los mismos puntos que el Barça y a seis del liderato madridista. Es lo que tiene medirse a una escuadra «con 25 jugadorazos ocupando las fichas del primer equipo y con un filial que va tercero en Segunda A». «Vamos a ver en el campo a hombres como Iborra, un excelente capitán, Kolodziejczak, que este año está contando menos después de haber sido importante com Emery, o Ganso, internacional brasileño. Nosotros no pensamos en el resultado, queremos soñar, pero vamos a respetar al rival. Lo importante es estar ordenados y no cometer errores. Cualquier resquicio lo intentaremos aprovechar. Sabemos que llevamos a la espalda la imagen de toda una isla».
Con el campo convertido en una olla a presión en miniatura gracias a las 2.300 personas que se sentarán en el ampliado Municipal, Sanjuán y los suyos vivirán una tarde mágica. Si obran o rozan el milagro, el 22 de diciembre irán al Sánchez Pizjuán a intentar que se alargue el sueño copero. Si caen, la visita a Sevilla servirá para cerrar esta romántica aventura por el torneo del KO.