@B.R./ El presidente de Autoritat Portuària, Alberto Pons, se ha reunido hoy con el alcalde de Vila, Rafa Ruiz, con el fin de tratar el futuro del puerto de la ciudad. En la reunión, que se ha prolongado durante más de una hora, Ruiz y Pons han dejado claro que el futuro de es Martell sigue siendo objeto de debate. «Nos han comunicado que tienen un acuerdo de pleno y nosotros hemos insistido en que el edificio es una necesidad portuaria, no es un capricho», ha apuntado Pons tras la reunión. Para el presidente de Autoritat Portuària lo ideal sería que se cumplieran los plazos y que en octubre se retomaran las obras en es Martell, que supone el derribo del antiguo edificio y levantar otro inmueble. «Lo ideal sería retomar las obras en octubre, pero siempre y cuando haya consenso», ha especificado Pons.
A la espera de los nombramientos
Ruiz, por su parte, se ha mostrado tajante en este punto y, a pesar de que estos trabajos ya estarían adjudicados, confía en que una vez que se haya coordinado el ejecutivo autonómico y se hagan los nuevos nombramientos, entre ellos el del presidente de Autoritat Portuaria, exista más sensibilidad hacia el municipio. «Nosotros ya tenemos la decisión tomada -en referencia al acuerdo unánime acordado en sesión plenaria- y ahora deberemos ver a quién se designa y trasladarle este acuerdo». Para Ruiz es importante que es Martell pase a ser una plaza pública y recuperar la fachada marítima para los ciudadanos y la ciudad.
En relación al aparcamiento soterrado, Pons ha reconocido que su construcción es «más complicada». «Yo solo del eslogan ‘business-parking; parking-business’ pero se negaron desde un principio. Nosotros seguiremos intentando convencer al Consistorio para que haya un aparcamiento, pero es difícil. Ahora mismo es más fácil que haya un consenso sobre el actual edificio y conseguir así toda la coherencia de la estética del puerto que con el aparcamiento», ha reconocido Pons.
Los fondeos
Otro de los puntos que se ha tratado en la reunión ha sido el fondeo de decenas de embarcaciones tanto en la bahía de Talamanca como en ses Figueretes. Pons ha recogido el guante y se ha comprometido a estudiar «técnicamente» la solución ya que Autoritat Portuaria tiene unos espacios reservaos para sus usos y con el fin de que embarcaciones mercantes puedan permanecer cierto tiempo de espera, por ejemplo. «Estoy a favor del uso pero no del abuso, así que vamos a estudiar qué barcos fondean, cómo lo hacen y dónde».
Por otro lado, desde el Ayuntamiento de Vila se ha pedido a Autoritat Portuària que solvente algunos detalles del nuevo paseo del puerto de Vila como la eliminación de obstáculos del carril bici, el alumbrado público, o unos pequeños salientes del suelo con los que la gente se tropieza. Según Pons, todas estas sugerencia «pequeñas» serán arregladas en las próximas semanas.
Asimimo, y en cuanto a la reserva de aparcamientos en la zona portuaria para los vecinos, tanto Pons como Ruiz han coincidido en señalar que deberá ser la empresa gestora del aparcamiento quien se ponga de acuerdo con los vecinos de la zona.
Por lo que entiendo en el último párrafo, los vecinos q se busquen la vida.
Sóc veí resident de la Marina de la zona del port i estic totalment en contra que hi entrin vehicles, taxistes, motos, autobusos, etc. en el nou passeig. En aquest aspecte no ha canviat gens la imatge del port, que crec que hauria de ser un espai lliure de vehicles i totalment obert a la ciutadania de Vila. Els dos primers dies després de la inaguració feia goig veure tota la gentada veinal passejant, amb espai a les places com la n’Antoni Riquer per poder jugar-hi amb els boixos. Ara tornar a estar tot ocupat pels comerciants avariciosos que prenen l’espai públic per a vianants com a propi, pels cotxes aparcats, pels taxistes que volen portar els turistes fins a la mateixa porta dels bars com el Zoo, quan ho podrien fer a la parada de Bartomeu de Rosselló o a l’entrada del port abans de les barreres (on es pot parar, descarregar i tornar a sortir). Després de la reforma era el moment idoni per acabar amb mals costums i s’ha deixat escapar l’oportunitat per, segons la policia portuària, pressió dels comerciants (gent que no hi viu aquí, només especula i s’ompli les butxaques). Però si ja ens havíem acostumat a no poder accedir-hi! Només s’hauria de deixar entrar unes hores molt limitades per a càrrega i descàrrega. Ara bé, si s’ha de poder accedir i aparcar exigeix que tots els veïns ho puguem fer en igualtat de condicions, o si no, ningú. I en qualsevol cas, primer la gent que hi viu i després la que hi ve per feina. Però repetesc, sóc partidari que no ho faci ningú i dotar Vila d’un espai ampli, lliure de motors i net per al poble.
entrada de vehículos de servicios necesarios..taxis, proveedores, etc. pero regulando horarios, prioridad -que no exclusividad- a la gente del barrio, y NUNCA que se pueda dar al vehiculo antes que al ciudadano la posibilidad de disfrutar de un paseo…
Els taxistes no tenen cap falta d’entrar-hi. A escassos 200 metres poden fer el mateix servei. Tant de vehicle només embruta, molesta i trenca el paviment nou. I després tots a pagar amb els nostres impostos.
Y Pons DIMISION!! arruix d,aqui!!
Me parece que el que no tiene mucho futuro como Presidente de la Autoridad Portuaria (vaya nombrecito!)es el actual, nombrado por el PP. Así que no se qué hace el Alcalde reuniéndose para tratar el futuro del puerto, con un señor al que le queda tan poco tiempo.
«Que dice Rafa Ruiz que el Puerto para la gente, pero que si quieren plazas de parking los vecinos…ya tal».
«Que dice Rafa Ruiz q como Sant Antoni y Santa Eulalia tienen parking subterraneo, Vila también debería, pero q lo pague otro(APB)»
Y a todo esto…..¿La APB ha presentado el PLAN DE USOS del Puerto?; ¿pueden consultarlo los vecinos?. Esto deberia conocerse y someterse a la opinion de los habitantes de Ibiza, como hicieron con la reforma de la Diagonal en Barcelona. Los interes de la APB ya los intuimos ( no he podido leer al Plan de Usos? ¿Alguien sabe si puede consultarse y me lo he perdido? ) ahora, cualquier gobierno responsable, deberia conocer la opinion del conjunto de los habitantes antes de tomar cualquier decisión.