El portavoz del Govern balear, Toni Costa, ha confirmado este jueves que el presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba, pidió recientemente un sobresueldo a la presidenta del Ejecutivo, Marga Prohens.
Costa no lo ha dicho directamente, pero sí ha señalado que es cierto lo que publican los medios de información sobre este asunto, es decir, que Córdoba exigió a Prohens y también al propio Consell de Formentera «sobresueldos» para poder hacer frente a su maltrecha economía familiar, según denunciaron ayer sus aún compañeros en el equipo de Gobierno de la institución insular, pertenecientes a Compromís y PP.
La petición de Córdoba, ha asegurado Costa en rueda de prensa, responde únicamente a «intereses personales», pero «nada tiene que ver» con la defensa de los intereses de los ciudadanos de la Pitiusa sur, bajo su punto de vista.
«El señor Córdoba pretendía condicionar la estabilidad del Govern, no en función de los intereses de Formentera y sus ciudadanos, sino de los suyos propios», ha dejado claro el portavoz.
Costa ha dicho que el sentido del voto de Córdoba en el Parlament, que ha pasado del Grupo Popular a formar parte del Grupo Mixto, no es decisivo para el Ejecutivo balear, que cuenta con un acuerdo de legislatura con Vox. Es decir, el voto de Córdoba «no es decisivo», ha apostillado.
«Al Govern balear no le parece una situación agradable», ha reconocido Costa, que ha dicho que se trata de un asunto que debe resolver Sa Unió, a la que Córdoba pertenecía como independiente hasta que ayer fue expulsado.
Sobre si Córdoba debe dejar su acta de diputado, Costa ha dicho que es una decisión que debe adoptar Sa Unió, que gobierna el Consell de Formentera, aunque, en verdad, esa decisión depende únicamente del propio Llorenç Córdoba, que ya no pertenece a este grupo, formado por PP y Compromís.
EFE