La consellera de Vivienda, Marta Vidal, ha rechazado este martes aplicar la ley estatal que permite limitar el precio de los alquileres porque afirma que esta medida «ha sido un fracaso» donde se ha aplicado y agravaría la falta de oferta de pisos en el mercado.
Vidal ha respondido de esta forma en el pleno del Parlament a preguntas de las diputadas Cristina Gómez, de Podemos, y Malena Riudavets, del PSOE, quienes han instado al ejecutivo a declarar ‘zona tensionada’ todo el archipiélago para frenar la subidas de los alquileres y establecer un índice de precios para las viviendas arrendadas por grandes tenedores.
La consellera ha expuesto una serie de datos para poner de manifiesto que el problema del mercado inmobilitario es la insuficiente oferta de viviendas y ha responsabilizado al anterior Govern de la subida del 80 % de los precios del alquiler en las últimas dos legislaturas.
Además, ha sostenido que pocos días después de la entrada en vigor de la declaración como zonas tensionadas de 140 municipios en Cataluña ya se «ha parado toda la inversión» ante la inseguridad jurídica que las medidas de la Ley de Vivienda generan en los propietarios y promotores.
Cristina Gómez ha considerado un error del Govern del PP rechazar la limitación de precios y ha instado también a buscar fórmulas legales para restringir la venta de viviendas a personas que no residan en el archipiélago.
Para Malena Riudavets, la actitud del ejecutivo supone «dar la espalda a las necesidades de los ciudadanos». «No perdemos nada por intentarlo», ha planteado.
Un fracaso es no hacer nada.
Desde que han llegado no solo no lo han solucionado si no que se ha agravado. No hacer nada, como lo que están haciendo, es un fracaso general y es la herencia de su gobierno que nos quedará., con todos los problemas generales en todos los sectores que acarrea esto.
Una cosa es no hacer nada, y otra es llevar a cabo medidas contraproducentes.
Una pena que sean tan corruptos como sus antecesores, porque a veces tienen buenas ideas, como no aplicar esta ley o quitar el impuesto al patrimonio.
La «solución» al «problema» de la vivienda (no es un problema para el que tiene una casa o quiere venderla con ganancias) es construir y quitar trabas a la compra-venta y sobretodo al alquiler. La ley del gobierno hace justo lo contrario y es una bendición que las comunidades puedan decidir si acogerse o no a ella.