La organización criminal desarticulada esta semana en Ibiza por la Guardia Civil se dedicaba al tráfico de drogas y blanqueo de capitales entre Sudamérica y Europa, y se valía de una empresa de alquiler de coches de lujo para introducir la droga en la isla, y para blanquear, junto a otras empresas bajo su control, el beneficio económico del narcotráfico.
En la operación, ejecutada el jueves, se practicaron 15 registros (12 en Ibiza y 3 en Madrid), y fueron detenidas 8 personas. También se intervinieron 19 vehículos, la mayoría de alta gama, valorados en 2 millones de euros, según ha informado la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia de Balears este domingo en un comunicado.
En los registros también se decomisaron diferentes cantidades y tipos de drogas, como 7,3 kilos de cocaína, 4 kilos de MDMA, 750 gramos de cocaína rosa, 14 kilos de hachís y 800 gramos de ketamina. También se incautaron 127.000 euros en efectivo y dos armas: una pistola Glock 26 con munición y un arma corta simulada.
La operación comenzó a finales de 2021, cuando los agentes detectaron la existencia de una organización internacional dedicada a introducir importantes cantidades de droga en Ibiza.
En la investigación, los agentes pudieron constatar que la organización tenía una red de contactos, empresas e infraestructura, que utilizaba para la introducción de grandes partidas de droga en Europa.
Para transportar la droga utilizaban contenedores que trasladaban por vía marítima principalmente desde Brasil y Colombia hasta puertos de Valencia, Barcelona, Amberes e Italia, desde donde se enviaban a su destino final, entre ellos la isla de Ibiza, y para lo que utilizaban camiones y vehículos con complejos sistemas de ocultación.
El grupo desarticulado en Baleares contaba con la infraestructura necesaria para adquirir parte de la mercancía y para introducirla desde Madrid a Ibiza en vehículos de lujo con métodos sofisticados de ocultación.
Cuando llegaba a la isla era distribuida a través de varios puntos de venta mientras que otras cantidades se trasladaban a Mallorca. El grupo criminal utilizaba empresas bajo su control para blanquear el “importante beneficio económico” que obtenía, y entre las que se encontraba una de alquiler de vehículos de lujo.
Además de blanquear el dinero procedente del narcotráfico, esta empresa era utilizada para introducir la cocaína en el archipiélago balear, utilizando algunos de los vehículos que habían sido modificados, para instalarles lo que se conoce comúnmente como «caletas».
La Unidad Orgánica de Policía Judicial de Baleares (UOPJ) ha estado al frente de la operación, en la que han participado diferentes unidades de la Guardia Civil.
Siete de los detenidos pasaron este sábado a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Ibiza en funciones de guardia, que decretó prisión provisional comunicada para todos ellos. Cuatro de los arrestados deberán ingresar en la cárcel sin fianza mientras que los otros tres podrán eludir la prisión pagando una fianza de 15.000 euros cada uno.
EFE