@Vicent Torres / EFE / El juez titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Eivissa, Santiago Pinsach, ha puesto en libertad provisional sobre las 16.45 horas de este miércoles al hombre de nacionalidad polaca y principal sospechoso de la desaparición violenta de Nuria Escalante. Pinshach señala en el auto la falta de indicios suficientes para sustentar la acusación y el «presumible estancamiento» de la instrucción.
La Guardia Civil le atribuye el delito de homicidio de la mujer, de 52 años de edad, a la que se le perdió el rastro en Sant Antoni el pasado 31 de octubre de 2018. El ahora liberado, de 37 años de edad, reconstruyó el pasado 21 de febrero las últimas horas que pasó junto a Escalante en Sant Antoni.
Según detalla, tras cuatro meses desde la resolución inicial de prisión provisional, y practicadas las principales diligencias de instrucción, no pueden considerarse «confirmados o reforzados” los indicios relativos al presunto “delito de homicidio/asesinato”, aun cuando “subsistan motivos en su momento ponderados para sostener la posible participación” del investigado en la desaparición de Nuria Escalante.
Asimismo, en el escrito se destaca que, a pesar de la “muy poderosa presunción de muerte” que se investiga, dicho fallecimiento “no puede ser confirmado”, al igual que el carácter “presuntamente violento” del mismo.
“Tampoco puede establecerse con la necesaria consistencia la autoría, en cuanto al investigado de que se trata, de aquello que no ha podido confirmarse”, prosigue el juez Santiago Pinsach.
En el relato de fundamentos, el juez apunta, además, que los registros realizados por la Guardia Civil no aportaron resultados positivos y que tampoco lo hicieron las numerosas diligencias de investigación tecnológica relativas a los teléfonos móviles de los implicados.
En relación al análisis las imágenes grabadas por varias cámaras de seguridad, el juez señala que no ha «dado el resultado esperado” en referencia al “contenido” del carro de la compra donde la Guardia Civil advertía la existencia de un bulto que podía ser el cuerpo de Escalante, que había negado el sospechoso, que defendía que era un motor de barco robado.
Asimismo, cabe destacar que el análisis de la sangre encontrada en una casa okupa de Sant Antoni determinó que no coincidía con el de Escalante.
Análisis de la tarjeta SIM
Finalmente, el magistrado señala que ahora se está a la espera de la información que pueda aportar el análisis de la tarjeta telefónica del móvil de Escalante, que puede ofrecer “un amplio margen de investigación que queda abierta y precisará tiempo”.
En esta línea apunta que la información solicitada a Google y relativa a la geolocalización exacta del móvil de la desaparecida es la “única diligencia actualmente pendiente”.
El investigado deberá comparecer ante el juzgado todos los lunes y cuando sea requerido. También se le ha retirado el pasaporte y deberá comunicar cualquier cambio de domicilio.
Ante este auto se puede presentar un recurso de reforma en tres días o de apelación en cinco días desde su notificación.