@Vicent Torres / El libro de papel, el que tiene olor propio y es rugoso al tacto, se ha reivindicado durante toda la jornada de este lunes con la celebración de Sant Jordi. Una fiesta que conmemora la muerte de dos figuras universales de la literatura como Miguel de Cervantes y William Shakespeare y que, además, ha sido la primera que ha llenado s’Alamera de libros tras el cierre de puertas el pasado mes de febrero de la librería Vara de Rey, la referencia durante décadas de los ibicencos. Un día en el que no se ha hablado de libros electrónicos si no de los de «toda la vida».
La capital ibicenca ha sido el punto que ha concentrado a un mayor número de vecinos durante este Sant Jordi, aunque el ambiente festivo ha predominado en el resto de pueblos de Eivissa y Formentera, que han desprendido el característico olor a papel y rosa propio de esta fiesta. Desde primera hora de la mañana, centenares de escolares han llenado los puestos repletos de ejemplares. Unas tiendas que han recibido peticiones que van desde los habituales best sellers –tanto los nuevos como los ya consolidados de otras ediciones– hasta de escritores ibicencos como Vicente Valero o Ben Clark, último premio Loewe de poesía por ‘La policía celeste’ (Ed. Visor).
Paquita Torres se ha estrenado este 2018 en el puesto de Blau Press. Durante la mañana, los ejemplares más demandados han sido las novelas y los libros infantiles, una tendencia que podría cambiar por la tarde: «Esperamos que venga más gente, pero la verdad es que la cosa, de momento, está yendo muy bien», ha afirmado a media mañana.
A unos pocos metros, los empleados de la librería Sa Cultural apuran para dejar el espacio listo ante la avalancha de gente que se espera a mediodía. Una diada «ilusionante» en la que el libro se reivindica y los vecinos aprovechan para «ampliar el abanico» de opciones. «La cosa está bastante diversificada. Es un día muy especial, no sólo para los libros más comerciales como pueden ser los de Stephen King, Blue Jeans o María Dueñas, si no también para el resto. La gente mira toda la caseta se venden también bastante clásicos y literatura infantil», ha explicado Pedro González.
Por su parte, Marga Roig, de la librería Can Jurat, se multiplica para despachar a los clientes junto a la iglesia de Sant Jordi mientras se celebra la misa en honor al patrón del pueblo. En el puesto, explica que, además de los libros infantiles (como en todas las paradas), algunos de los títulos más vendidos están siendo las últimas novedades, como ‘Las hijas del agua’ de Sandra Barneda (Ed. Suma).
Missa, carros y fiesta en el día de Sant Jordi
El otro pueblo de las Pitiüses que ha tenido más actividad, como no podía ser de otra manera, ha sido el de Sant Jordi. La misa solemne, oficiada por el párroco Joaquín María López de Andújar, obispo emérito de Getafe, ha comenzado puntual a las 11 horas en una abarrotada iglesia.
Un goteo constante de familias ha ido llegando al templo durante los aproximadamente 60 minutos que ha durado la homilía, que ha sido el paso previo a la procesión y al desfile de carros, que han recorrido las principales calles del núcleo urbanoo. Cargos políticos de todos lo partidos han asistido a la celebración (aunque los representantes de Podemos no han entrado a misa), que ha contado con la actuación de la colla del Grup Folklòric Sant Jordi de ses Salines.
Durante el resto del día están previstos un taller de puntos de libro (21 horas) y la actuación del grupo tributo a ABBA (17 horas). Los actos enmarcados dentro del programa de fiestas se prolongarán hasta el 27 de mayo.
Con la desaparición de la libreria Vara de Rey el paseo ha perdido uno de sus mejores alicientes:un lugar donde comprar periódicos y revistas-Espero que el Alcalde atienda el deseo de todas las personas que todavía compran estos menesteres y tengan al menos lo que siempre ha tenido este paseo
Un kiosko de prensa, como habia antes, y no tanta mesa de bares
Por favo, libro de papel.
Eso de libro analógico me parece una pardillada
Jo amb enterra de S’Alamera tota plena de pedres no puc llegir tranquil. I ses roses no floreixen.
Toda la vida he comprado el libro y la flor por San Jordi . Ayer , cuando leí el artículo de Bernat Joan diciendo que San Jordi era la fiesta y diada dels Paissos Catalans , decidí no comprar el libro ni la flor , lo compro hoy y punto. Que manera de politizar la cultura .
Ja som dos, quin fart.
Lo dices por ti?