El presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba (independiente que fue expulsado de su propio grupo político de gobierno, Sa Unió, formado por PP y Compromís) ha tomado la decisión de cesar al vicepresidente tercero y conseller de Promoción Económica y Administración Insular, José Manuel Alcaraz, «por falta de confianza», según ha explicado esta mañana en declaraciones a los medios de comunicación. «La semana próxima se hará efectivo. El mismo lunes ya estará listo y hecho, no es muy complicado», ha indicado.
Córdoba justifica esta decisión tan drástica: «He tenido que tomar la decisión por falta de confianza», ha dicho y ha añadido que ha sufrido por parte de Alcaraz «una especie de bloqueo hecho a posta y malintencionado». «Lo más correcto era cesarlo de sus responsabilidades», ha añadido.
Por el momento no sabe cómo quedará reordenado el pleno, pero evidentemente Alcaraz ya no podrá sentarse dentro de la bancada del equipo de gobierno y pasará a la bancada general.
Córdoba ha recordado, no obstante, que Alcaraz conserva su acta, «obviamente».
Con respecto a los motivos concretos, ha apuntado a Alcaraz como responsable de una «filtración malintencionada» que insinuaba una maniobra oscura detrás del nombramiento como asesor jurídico de un letrado que cobrará 1.200 euros extra al mes por este cargo. Córdoba ha explicado que ha sido un nombramiento hecho simplemente para descargar al secretario y mejorar el funcionamiento de la institución y ha considerado muy grave «decir que puede haber algo oculto, me parecen acusaciones que se pasan de la raya».
«No cobra más que los otros letrados: venía de un salario más bajo y ahora tendrá una mayor disponibilidad y productividad, es decir, más responsabilidades. Ojalá pudiésemos subir el salario a todos», ha añadido.
Ha remarcado que no es un asesor legal personal del presidente sino un apoyo para Presidencia en muchas funciones «para no bloquear al secretario de la casa», ha añadido.
Córdoba cree que, ahora que Alcaraz ha sido cesado, «será más sencillo hablar con el resto de consellers de Sa Unió y zanjar la crisis».
«La persona que generaba el problema no podrá frenar la comunicación como hasta ahora», ha dicho Córdoba que asegura que él ha seguido trabajando mano a mano con los funcionarios para sacar adelante el trabajo.
Remarca el presidente que este cese «no es un tema personal de rencores sino de lo que interesa a la gente de Formentera: que se pueda funcionar y pasar ya esta crisis».
El presidente va a asumir temporalmente las áreas de Alcaraz hasta que se redistribuyan entre los demás consellers.
A pesar de la crisis de la institución, Córdoba subraya que no está solo: «Los que se han quedado solos son Sa Unió» porque los funcionarios colaboran y trabajan y la oposición en el Consell lo respeta como presidente, afirma.