L.Aversa/ La propiedad de la mansión ilegal de Puig d’en Serra ha denunciado el derribo de su vivienda ante la Comisión Europea, con una queja formal enviada a mediados de noviembre.
En un último intento para evitar la demolición, el propietario remitió un escrito a la Dirección General de Medio Ambiente, que ha aceptado “examinar” su denuncia “a la luz del derecho de la Unión Europea”.
La denuncia fue presentada el 12 de noviembre, a solo quince días del inicio del desmantelamiento de la casa, que esta semana ha quedado reducida a escombros en cumplimiento de la sentencia que declaró ilegal la licencia de obras otorgada por el Ayuntamiento de Sant Josep.
En su queja, la entidad propietaria, Goettinger Vertiebsgesellschaft Louxemburg S.A, insiste en que las obras de derribo contravienen normativas europeas de conservación de aves silvestres y hábitats naturales. Según ha reiterado, en esa zona anidan especies de aves protegidas, que motivaron su protección como Lugar de Interés Comunitario (LIC) en la Red Natura 2000.
Como ya lo había hecho previamente ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo, el propietario ha informado a la Comisión Europea que una resolución de la Red Natura 2000, señala que las obras de demolición deben hacerse fuera de la época de cría de las aves protegidas. También ha enviado el informe de un experto que concluye que la época de cría “se extiende a lo largo del año”, con lo cual, la sentencia de derribo era “inejecutable”.
Según el escrito remitido a la Comisión Europea, “sorprendentemente la Conselleria de Medi Ambient emitió un informe jurídico en el que dejaba en las manos del Juzgado el momento en que debía realizarse las obras de demolición”, denuncia la propiedad.
La indemnización “será importante”
El abogado Jaume Roig, que defiente a los propietarios junto al también abogado Noel Leryke, ha anunciado que la indemnización por responsabilidad patrimonial que se reclamará al Ayuntamiento de Sant Josep “será importante porque en su momento se otorgó la correspondiente licencia”.
El abogado ha señalado que aún no puede precisar la cantidad que se reclamará, pero ha anunciado que lo hará con “carácter inmediato”. Según ha explicado, la reclamación seguirá la línea que «en su momento se anunció y se presentó», y que, según se hizo público en 2011, ronda los tres millones de euros.
Tan solo diez días antes del desmantelamiento de la casa, el pasado 17 de noviembre, la propiedad remitió un escrito al Consistorio anunciando su denuncia ante la Comisión Europea y advirtiendo de la reclamación patrimonial que solicitará tras el derribo.
Las obras de demolición no están terminadas
Las obras de demolición iniciadas la semana pasada por la empresa especializada en derribos Erri Berri S.L, no terminarán hasta la semana que viene. Si bien la estructura de la mansión ha sido totalmente destruida con una máquina retroexcavadora, aún quedan en pie la piscina ubicada junto al acantilado, los anejos de la parte trasera y el muro de piedra que rodeaba la mansión.
Aunque en un principio estaba previsto que el derribo se hiciera en pocos días, finalmente durará casi dos semanas. Aún así, desde la empresa han negado retrasos y han explicado que se cumple con los plazos previstos para la demolición.