El yate quemado contamina la costa de Ibiza

Las imágenes hablan por sí solas: aguas turbias por el aceite y el combustible, así como trozos de materiales quemados flotando hasta la costa… Los restos del yate ARIA SF, que se quemó el pasado jueves en la costa de Formentera y que acabó hundido frente a la de Santa Eulària, están contaminando un área marina protegida.

Un vídeo y varias fotos facilitadas por Jaume Ribas y el grupo de ciudadanos Prou! muestran la contaminación que está generando el yate calcinado, que se hundió en la costa de Cap Martinet- S’Estanyol, donde ya han aparecido grandes manchas y trozos del casco en los embarcaderos de las casetas de pescadores.

«Es urgente que se tomen medidas inmediatas para evitar el vertido de combustible en la zona costera o que se balice adecuadamente para evitar que se extienda descontroladamente en caso de producirse», alertan desde el grupo Prou!.

Preocupado por estos hechos, el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, ha visitado hoy el área marina afectada, que además toca dos zonas protegidas incluidas en el conjunto de espacios de la Red Natura 2000 con las figuras de CIEGO y ZEPA.

Acompañado por el conseller de Gestión Ambiental, Vicente Roig y el técnico de Medio Ambiente del Consell de Ibiza, Jaume Estarellas, además de por el técnico de Pesca de la institución, Toni Box, y por representantes de los pescadores de esta zona, el presidente Marí ha podido comprobar la afectación que los restos del hundimiento está provocando en este litoral, puesto que hay una gran cantidad de restos que están llegando a las costas próximas, como las playas de Cala Roja y de s’Estanyol.

🖊️@vmaritorres demana al Govern d’Espanya que intensifiqui les tasques de descontaminació de les restes de l’enfonsament de l'Aria

✅ El president ha visitat la zona afectada acompanyat de @roigtur, de tècnics de medi ambient i pesca i de pescadors afectats.

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— Consell d'Eivissa (@Consell_Eivissa) August 17, 2022

Además, la creciente dispersión de líquidos contaminantes a la zona, de restos quemados de la embarcación a la costa, está generando gran preocupación entre los vecinos y visitantes del entorno.

Marí ha expresado su preocupación por los efectos que esta contaminación provocará a los fondos marinos, donde conviven diferentes hábitats naturales protegidos, y ha explicado que ha remitido dos cartas, una a la Delegada del Gobierno y otra a la Directora General de Biodiversidad, Bosques y Desertificación, pidiendo a la Delegación que el Gobierno de España, como autoridad competente, intensifique las tareas de contención para prevenir la contaminación marina y del litoral que puede provocar este incidente, al tiempo que proceda a la mayor brevedad posible a la descontaminación de la totalidad de elementos dispersos a la zona (carburantes, aceites y refrigerantes).

Además pide la retirada de los restos sólidos del barco quemado y que se estudien los daños ocasionados al fondo marino en la zona afectada para restaurar los posibles daños ambientales.

Marí ha exigido al Ministerio que haya “un responsable que se ponga al frente de estas tareas para contener todos los prejuicios que el hundimiento del yate Aria está provocando” y también ha pedido implicación al Govern balear “que no puede dejar abandonado este yate en el fondo del mar”.

“Necesitamos responsables políticos que hagan los esfuerzos necesarios para evitar la contaminación en esta zona tan delicada del litoral de nuestra isla” ha concluido Marí.

En la misma línea, el PP de Ibiza ha manifestado este miércoles a través de un comunicado su “enorme preocupación” por las consecuencias del hundimiento del yate ARIA SF frente a la costa de Santa Eulària y ha reclamado al Ministerio de Transportes y al de Transición Ecológica que supervisen en todo momento las tareas de control y posterior reflotamiento de la embarcación.

Los populares, que se han mostrado preocupados por los desprendimientos de residuos de la embarcación que ya se han detectado y por el riesgo a un eventual vertido mayor de combustible o aceites contaminantes, han exigido también la presencia de la delegada del Gobierno en Baleares. 

Además, han reclamado la presencia de efectivos de la Conselleria de Medio Ambiente por ser el organismo competente en la limpieza del litoral.

Para el diputado Miquel Jerez, “las administraciones responsables, el Gobierno de España y el Govern balear, deberían desarrollar un seguimiento constante en el lugar del siniestro”. 

Según ha destacado, “no es posible” que el Ministerio competente “se desentienda y lo fíe todo al buen hacer” del armador: “Es necesario un control permanente por encontrarse el pecio en un espacio protegido y muy próximo a la costa”, ha insistido. 

Jerez ha advertido que la llegada de material calcinado a la costa “está siendo una constante” y la presencia de gasoil y otras sustancias contaminantes en la superficie “es ya una evidencia clara”. 

El diputado ha lamentado que, a excepción de las autoridades locales, “nadie se ha preocupado por las consecuencias”. 

Por su parte, el senador autonómico José Vicente Marí ha insistido en la “irrenunciable necesidad” de mantener la coordinación entre instituciones.

En esta línea ha destacado que mientras el Ayuntamiento de Santa Eulària “limpia su propia costa” y el Consell Insular reclama “más presencia en el lugar”, el Gobierno de España “no está presente”. 

Por último, ha señalado que “es necesaria información oficial, transparente y actualizada” y ha criticado que se conozcan las consecuencias por vídeos de particulares colgados en las redes sociales. 

“La ciudadanía merece respuestas inmediatas y un mensaje de tranquilidad y control. La incertidumbre genera alarma”, ha añadido Marí.

La embarcación es propiedad del empresario Paolo Scudieri y estaba valorada en 25 de millones. 

Tal y como publicaba Noudiari, el barco de Salvamento Marítimo Guardamar Concepción Arenal se encargó de alejar el yate de Cala Saona, hasta una cierta distancia de seguridad, para evitar que se contaminase la costa.

 Un día después, en la tarde del viernes, el barco llegó hasta aguas de Ibiza, cerca de Cap Martinet, donde se fondeó. 

El armador del Aria SF se hizo cargo de la situación y contrató a buzos especialistas, que comenzaron a trabajar en la zona el fin de semana para terminar de extinguir el incendio y acondicionar el yate para poder llevarlo a remolque hasta un puerto de la península, incluso en caso de que se hundiera. De hecho, se acercó el yate hasta la costa precisamente para hacer más fáciles las tareas de reflotamiento en el caso hipotético de que se produjera un hundimiento, lo que finalmente sí sucedió.