Agentes de la Policía Nacional en Ibiza han detenido a un varón de 28 años de edad, de origen italiano, como principal responsable de un grupo criminal especializado en la comisión de robos con violencia de relojes de alta gama, conocidos como Bandas del Rolex.
El varón detenido está completamente arraigado en la isla de Ibiza desde hace años e incluso regenta una empresa dedicada al alquiler de motocicletas.
Precisamente las pesquisas policiales sobre esta empresa hicieron sospechar a los investigadores que el presunto autor podría estar dando apoyo logístico a los “grupos de acción” desplazados desde Nápoles para ejecutar materialmente los robos.
Pero es que, además de regentar la empresa de alquiler, también participaba activamente en los robos de los relojes
Así, la labor del denunciado iba más allá del apoyo logístico, ya que él mismo se encargaba de pilotar las motocicletas de su propia empresa para facilitar la huida de los autores después de cada robo.
Además, los agentes averiguaron que el mismo individuo se dedicaba a recepcionar y ocultar los relojes después de su sustracción, a la espera de poder sacarlos de la isla.
Con todas estas averiguaciones, el grupo de la UDYCO de la Brigada de Policía Judicial de la Policía Nacional en Ibiza detuvo al hombre la semana pasada y, al registrar su domicilio, encontraron nada menos que 14 relojes de alta gama valorados en unos 300.000 euros, así como 48.000 euros en efectivo.
El presunto autor ha pasado a disposición judicial como presunto autor de al menos ocho robos en Ibiza y el Juzgado de Guardia acordó su ingreso en prisión sin fianza.
Las denominadas Bandas del Rolex de origen napolitano son grupos organizados de carácter itinerante que actúan en las principales zonas turísticas del territorio español, informan desde la Comisaría de Ibiza.
Llegan a estos lugares durante la época estival haciéndose pasar por turistas y elaboran un estudio detallado de los locales frecuentados por el turismo de lujo, analizando las principales vías de acceso y salida de las localidades en las que operan.
Eligen a las potenciales víctimas, les hacen seguimiento y finalmente las abordan, empleando violencia física, para sustraerles el reloj de un fuerte tirón.
Acto seguido emprenden la huida en una motocicleta que permanece en las proximidades del lugar de los hechos y que conduce otra persona.
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