@Noudiari/ Sam aterrizó en Ibiza procedente de Londres el pasado miércoles día 19 y acudió en busca de la habitación que había alquilado para pasar una noche a través de la plataforma Airbnb. Su sorpresa fue que al llegar a la casa se encontró con que la mujer con la que había hecho el trato para alojarse en la vivienda no vivía allí y otra persona estaba viviendo en la casa, el hijo de la propietaria, que anteriormente tenía el inmueble alquilado a un conocido de la presunta estafadora que fue desahuciado por no pagar el alquiler.
Según ha relatado el actual morador de la vivienda «a las 2 y media de la madrugada se presentó en casa un turista inglés diciendo que había alquilado una habitación aquí. Tenía la reserva de Airbnb en la que, efectivamente, figuraba una tal Sheila que le había alquilado la habitación para pasar una noche por 40 euros. Me mostró que la había pagado con el documento de la agencia online donde lo había contratado y todo y fuimos a buscar a la chica, porque casualmente sabía donde trabajaba, pero lo negó todo a pesar de que en la reserva aparecía su teléfono y todos los datos».
Sam, por su parte, ha aclarado que no ha denunciado la presunta estafa a la policía, «sinceramente, por falta de tiempo, porque vienes a pasar unas vacaciones y no tienes que estar pasando el tiempo denunciando. Además cuando comuniqué que me habían estafado a Airbnb me devolvieron el dinero, es decir, que he recuperado los 40 euros, pero no puede ser que cada día pasen cosas así a personas que solo queremos venir a pasar unos días disfrutando de la isla», la lamentado.
El turista de origen británico afirma que «debería haber más control de la policía y garantía de que lo que se alquile sea legal». «Yo al final he encontrado otro sitio donde quedarme, pero después de pagar, llegas y te encuentras con que te han estafado y no es la mejor manera de empezar las vacaciones ni una experiencia grata para contar. Perjudica mucho la imagen de la isla entre los turistas», ha añadido el turista.
La propietaria de la vivienda, que ya tuvo problemas con el anterior inquilino del inmueble, ha decidido no presentar denuncia y dejar pasar el incidente ahora que su hijo es quien habita la vivienda, mientras que Sam ha asegurado que quizá piense en presentar la denuncia cuando llegue a su país. «Ya perdí la noche del miércoles al sábado y ahora quiero disfrutar mis vacaciones, pero hay que dejar constancia de lo que ocurre para que dejen de pasar cosas así», ha concluido el turista.
Sam dice que “debería haber más control de la policía y garantía de que lo que se alquile sea legal”.
No puedo evitar que me haga gracia leer esta frase. Estás son cosas que la gente de aquí llevamos pidiendo desde hará décadas. Pero Sam tiene que entender que este no es un país del primer mundo como el suyo, que esta es en realidad una monarquía bananera con un pie en el tercer mundo pero de apariencia superficial de ser del primer mundo, en el que no hay control, no hay garantías de nada, apenas hay la policía necesaria y lo legal es una fachada falsa de lo ilegal, que es lo que aqui realmente se aprecia y retribuye. La gente que no conoce España y viene para unos días no sabe realmente como funciona todo bajo esa capa de maquillaje que lleva todo…
Viaje, salga de su pueblo y vea el mar
La casa en la que nací y me crié está menos de un kilómetro del mar, y en aquella época tenía vista directa hacia el mar sin nada que lo tapara mas que higueras algarrobos y algunas sabinas y pinos, lo veia mañana tarde y noche, a diario, año tras año
Sam lo que tiene que hacer es ir a un hotel o a un hostal y dejarme de historias baratas. Turistas a los hoteles y las meretrices a Figueretas, cada cosa en su sitio.
las meretrices como las llamas no habitan solo en figueretas, a ver si sales un poquito mas, que igual te encuentras una debajo de tu casa
Figueretas?? Pero si donde más hay ahora mismo es en el paseo maritimo, Keeper, Lio, Ciprianis etc etc …
La noche del miercoles al sabado ??? Pues que noche más larga @noudiari