@Noudiari/ Una vez más, las Pitiüses se sitúan en cabeza del mercado turístico español. En esta ocasión, Formentera ha destacado por ser el cuarto destino nacional que ha registrado un mayor incremento en la demanda de alquileres turísticos con un 25% más de solicitudes que en junio de 2012, según un estudio realizado por el portal especializado en este tipo de viviendas Homelidays.
Por encima de la isla pitiusa sólo se encuentra la Costa Brava, en Catalunya, donde las demandas se incrementaron en un 30% con respecto al mismo mes del año anterior. En segundo y tercer lugar encontramos la Costa Blanca y Mallorca, donde las solicitudes de apartamentos turísticos se disparó en un 26%, sólo un 1% por encima de Formentera.
Este 25% sitúa a Formentera muy por encima del incremento medio contabilizado en España, fijado en el 18%. Por nacionalidades, las subidas más acusadas de demandas de alquileres turísticos las protagonizaron los británicos, con un 27%, y los franceses, con un 26%. El turismo local experimentó una subida del 14% y el italiano solicitó un 12% más de reservas que en junio de 2012.
La recién aprobada normativa de viviendas turísticas
La Mesa de Ordenación Turística de Formentera aprobó el viernes una normativa definitiva para las viviendas turísticas que se ofrecen en la isla. La consellera de Turisme i Mobilitat de Formentera, Alejandra Ferrer, y presidenta de la Mesa d’Ordenació Turística, que cuenta entre sus miembros con representantes de todos los partidos políticos de la isla, la Pimeef, agencias de viajes e inmobiliarias, entre otros, anunció que el reglamento definitivo se aprobará en el próximo pleno del Consell, pero la Mesa ha establecido los requisitos opcionales y obligatorios que deberán tener los arrendadores turísticos para cumplir con la legalidad.
De este modo, los requisitos mínimos para obtener la acreditación de vivienda turística obligan a garantizar un correcto estado de conservación de las casas, así como la instalación de extintores, equipamientos mínimos de cocina, un botiquín de primeros auxilios, televisor y la elaboración de un manual del turista en diferentes idiomas, además de poner a disposición de los usuarios una hoja de reclamaciones.
La tasa correspondiente a la apertura de establecimientos de estancias turísticas en viviendas tendrá una vigencia de cinco años y costará 414 euros hasta dos plazas, a los que se añadirán 24,84 euros por cada plaza adicional hasta un máximo de 12. La preinscripción de estos inmuebles podrá realizarse a partir del 15 de julio en el área de Ordenación Turística de Formentera, donde también pueden dirigirse las personas que quieran obtener más información sobre la nueva normativa.