Ana Mateos/ Faltan pocos minutos para las diez de la noche, y se ultiman los detalles en el backstage improvisado, un salón multiusos al lado de la Iglesia de Sant Ferran. Litros de laca para peinados imposibles, retoques de maquillaje, y por supuesto, algún que otro arreglito aguja en mano, para que las prendas sean una prolongación de los cuerpos. Va a empezar la Sexta Edición de la Pasarela Formentera.
Pasadas las diez de la noche, alrededor de 800 espectadores se congregaban en la Plaza de la Iglesia de Sant Ferran, entre los que hemos podido ver a vecinos de la isla, turistas, familiares de los creadores y de los modelos, y también políticos: miembros del equipo de gobierno y de la oposición, que no sabemos si han tomado buena nota de las propuestas de los diseñadores y tal vez decidan ponerlo en práctica en el próximo pleno municipal. Ha abierto la pasarela la consellera de Turismo, Alejandra Ferrer, con unas palabras pronunciadas en catalán, castellano, inglés e italiano.
El acto ha comenzado y tras un primer parón de escasos cinco minutos por un problema eléctrico, ha arrancado con fuerza. Una pasarela en la que hemos podido ver un total de diez diseñadores clásicos de nuestra isla, como las propuestas de calzado de Ishavara, las maravillosas joyas inspiradas en el ball pagès de Enric Majoral, la ropa casual de Jesús Costa, los siempre originales y con reminiscencias retro modelos de Obi, además de los esperados y espectaculares vestidos de novia y fiesta de Eva Cardona.
Pero también, hemos podido disfrutar, de las propuestas de Mundo Insolito, Macramé, los llamativos complementos de Steffen Hessen, los bikinis de Jane Ibiza o las joyas de Andrés Rodriguez. A lo que debemos añadir, como diseñadora invitada en esta edición, las creaciones en vinilo de Sol Courregues.
Diseños inspirados en el mar, la luz y las tonalidades del cielo de Formentera, y que este año han rendido un especial homenaje al poeta pitiuso Marià Villangómez, de manera que cada diseñador ha escogido un poema del autor para poner nombre a sus colecciones.
Una pasarela original y low cost
El nivel de los diseños que han desfilado por la pasarela contrastaba con el escaso presupuesto que ha tenido esta edición (5.500€ aportados por el Consell de Formentera) y que, lejos de suponer un problema, ha contribuido a que, por ejemplo, todos los maniquíes que se han visto luciendo las propuestas sean vecinos de la isla, que lo mismo te sirven un café como camareros o te atienden en un comercio, que se suben, sin nada que envidiar a las top models, a una pasarela y lucen las creaciones de manera fresca, divertida y espontánea. Como hizo Marcos Contreras, el portero de la S. D. Formentera, quien sorprendió a todos subiéndose a la pasarela.
También los presentadores de la Pasarela han sido rostros conocidos de la isla, un dúo ingenioso compuesto por Susana Marín, trabajadora del área de Turismo del Consell, y Joan Marí, un joven actor formenterense. La sintonía entre ambos ha sido tan especial, que cualquiera que les haya visto podría proponerlos para las próximas campanadas del 2014.
La sexta edición de la Pasarela Formentera ha sido una lección de estilo, moda, y originalidad, en la que los diseñadores, como cada año, han dado lo mejor de sí mismos y las creaciones han asombrado al público asistente, que era incapaz de dejar de comentar cada uno de los modelos que se han podido ver.
Una moda, la de Formentera, que parece haberse creado un nombre y que saca pecho, cada año durante su pasarela pero también cada día cuando los formenterenses pasean los diseños por las calles de la isla.