@Noudiari/ La junta directiva de la Federación Hotelera de Eivissa y Formentera han emitido un duro comunicado contra la Conselleria balear de Turisme, asegurando que «inician la desconexión» de la misma, coincidiendo con la publicación en el BOIB del borrador de la ecotasa.
Los empresarios hoteleros apuntan que no se han tenido en cuenta en la redacción de este borrador los argumentos esgrimidos contra la tasa. Pero además, señalan que este nuevo impuesto perjudica su imagen en el mercado y que beneficia a la oferta ilegal. «Por mucho que, en un ejercicio de cinismo extremo, se quiera hacer ver que también pagarán el impuesto; solo lo van a pagar nuestros clientes».
«Un mísero porcentaje»
Consideran desde la Federación Hotelera de Eivissa y Formentera que el impuesto no va a solucionar nada ya que los 50 millones de euros que se prevé que recaudará es el 1% del presupuesto de la Comunitat Autónoma. «Para tan mísero porcentaje tenemos que perjudicar muy seriamente la imagen y la rentabilidad de nuestra principal industria, que supone el 85% del PIB». Asimismo, critican que el impuesto es el más caro de España y lo tildan de ser un impuesto recaudatoria, «que no tiene nada de finalista y se lo van a gastar como el resto del presupuesto».
Los hoteleros consideran que la entrada en vigor de esta tasa perjudica «con más intensidad» al turismo familiar, las temporadas bajas y la rentabilidad de las explotaciones hoteleras, «lo cual reducirá su capacidad de mantenimiento y reinversión; luego pedirán un esfuerzo hacia la calidad», señalan. Pero van más allá, y apuntan que al dedicar su tiempo de atención a recaudar impuestos se perjudica también la atención al cliente, «en vez de darle servicio». «Además de imponernos más trabajo administrativo, luego nos hablan de simplificar la administración», continúan.
Sin respeto para las reservas de 2016
Por otro lado, critican que no se respetan las reservas hechas para el próximo año «ni los contratos ni las obligaciones firmadas».
Según indican en el comunicado, «la saturación que hemos experimentado hasta ahora se va a convertir en un recuerdo agradable, y los contratos de seis meses de duración en un objeto de museo», señalan.
Para concluir indican que han perdido toda la confianza en la Conselleria de Turisme del Govern balear aunque mantienen la esperanza de que los Consells Insulares de Eivissa y Formentera «sepan defender nuestros intereses de las medidas concebidas en Mallorca y seguiremos colaborando con ellos en la defensa de los intereses de nuestras islas».