Goteras, a veces auténticos chorros de agua, charcos y regletas que se tienen que colocar sobre sillas para evitar que se produzca un cortocircuito. Esta es la denuncia que llega a Noudiari sobre un tema que viene de largo pero al que no se ha dado una solución.
El sótano donde se encuentra el depósito de vehículos de Ibiza, junto a la nave de Endesa, presenta hoy este aspecto, con charcos por toda la superficie y goteras que tratan de controlar con cubos de fregar y hasta con papeleras.
Además, las peores goteras están en la zona de mostradores de atención al público, con lo que se ofrece una imagen lamentable a los ciudadanos, según destacan los denunciantes.
Por si fuera poco, las regletas para los enchufes tienen que ponerse sobre las sillas y cajoneras para evitar que les alcance el agua y acaben provocando un cortocircuito.
Condiciones nada seguras para el trabajo de los empleados en este lugar, a la vez que generan incomodidad y mala imagen para los usuarios.
Repito, Rafa Gotera y Otilio chapuzas a domicilio