EFE / La segunda fase de excavación y exhumación en el Cementerio Viejo de Ibiza, ubicado en el barrio de ses Figueretes, se ha cerrado este viernes con el hallazgo de restos óseos de víctimas de la dictadura franquista, 12 casquillos y proyectiles y, por primera vez, la evidencia de que se produjeron fusilamientos en el mismo cementerio.
En una rueda de prensa, la directora de la excavación, la arqueóloga Almudena García Rubio, ha explicado que finalmente se pudieron excavar tres de los cuatro sondeos previstos para esta segunda campaña, y que en los tres se han hallado restos compatibles con represaliados.
Según ha detallado, estos restos se han encontrado «en posición secundaria» lo que significa que «las fosas estuvieron aquí, pero ahora están tocadas por enterramientos ordinarios posteriores», ha indicado.
En cada sondeo se ha hallado «una concentración de huesos en un estado de conservación aparentemente bueno» así como fragmentos de cráneo «con marcas de paso de proyectil de arma de fuego y otros huesos con fracturas perimortem», ha indicado García Rubio.
Ahora se iniciará la fase de laboratorio para reconstruir los hallazgos e intentar determinar el número de víctimas y el tipo de lesiones.
Por otra parte, también se han encontrado 12 casquillos y proyectiles: 8 casquillos y dos proyectiles de fusil Mauser, uno completo sin disparar y uno disparado, y otros dos de casquillos de arma corta, también Mauser, el arma oficial del ejército franquista.
En cuanto a la evidencia de los fusilamientos in situ, García Rubio ha explicado que hasta el momento no se había escuchado que se hubieran producido dentro del cementerio. «Que estén los casquillos quiere decir que fueron disparados aquí y tiene sentido que en una de las paredes de las capillas, que no está tan arreglada como las demás, todavía puedan verse el impacto de los disparos», ha añadido.
En concreto, se han contabilizado unos 60 impactos de proyectil y de esquirlas.
En la rueda de prensa también han estado el director general de Memoria Democrática, Marc Herrera y la concejala de Cementerios, Claudia Cotaina, y el presidente del Foro por la Memoria de Ibiza y Formentera, Lluís Ruiz.
Ruiz ha valorado muy positivamente esta campaña porque, a pesar de que en el cementerio el «terreno está muy alterado», las evidencias encontradas permiten «ampliar y completar el relato histórico».
El presidente del Foro por la Memoria cree que el trabajo deberá continuar con la excavación del cuarto sondeo, que no se ha podido hacer por falta de tiempo, a la vez que ha explicado que una docena de familias han dado muestras de ADN para contrastar con los restos hallados, una posibilidad que se mantiene abierta a más familias.
Para cerrar la campaña se ha hecho una entrega floral en el mural de los represaliados a las únicas dos mujeres que están documentadas como víctimas, Bárbara García Loreto (de Sant Miquel) y Eulària Marí Torres (de Sant Joan), que, con 29 años la primera y con 28 años la segunda, fueron asesinadas el 2 octubre de 1936.
El Govern balear ha anunciado que se estudia la posibilidad de llevar a cabo una tercera intervención en el cementerio con el objetivo de seguir avanzando en la posible identificación de hasta 70 víctimas de la represión franquista.